Objetivo Girona, por Javier RODRÍGUEZ

Existen peleas con la historia y campos malditos que nunca más querrías volver a pisar. El destino caprichoso a veces se empeña en poner reiteradamente la misma piedra en el camino para que tropieces una y otra vez y caigas siempre de la misma manera. Alcorcón ya forma parte del pasado. Y no se puede volver atrás ni tampoco saltar nuevamente al Alcoraz para restañar las heridas abiertas.

No queda tiempo para lamentaciones y pretender que todo está perdido. El horizonte otea una nueva reválida para rectificar el rumbo y enderezar el camino. Así es el fútbol. Cambiante. Donde cada siete días se presenta una nueva oportunidad para la revancha. Para corregir los errores.

Sin tiempo para más, la UD Las Palmas debe proponer su estilo, marcar su territorio y hacer hincar las rodillas al primer grande en el Gran Canaria. Una victoria que se antoja reivindicativa, de autoestima y de convencimiento general. Un golpe de autoridad. Una llamada de atención al fútbol. Un grito de unánime de que no estamos muertos y somos candidatos a todo.

por Javier Rodríguez
 @javierodr 
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