Eulogio Romero: «El fin del concurso es un renacer»

Fue consejero y vicepresidente de la Unión Deportiva Las Palmas en una etapa crítica, uno de los que impulsó la idea de aventurarse a solicitar un proceso concursal pionero para un club de fútbol, estando la entidad grancanaria al borde de la desaparición. Eulogio Romero dispuso también de un papel fundamental dinamizando al entorno social amarillo. Celebra como un título el fin de la década concursal.

«Es un renacer, creo que el 17 de diciembre de 2014 Las Palmas renace, es una Unión Deportiva Las Palmas completamente distinta con respecto a las últimas dos décadas. Está libre de deuda, libre de agobio de acreedores y solo tiene dificultades del día a día. Es un hecho histórico». Así se expresa Eulogio Romero, ex vicepresidente de la entidad de Pío XII en uno de los momentos más delicados de la historia de la Unión Deportiva. Fue uno de los impulsores de en la Ley Concursal junto a distintos consejeros en noviembre de 2005. Este miércoles se ha cerrado el proceso salvador diez años después.

Para Romero era fundamental cerrar el caso. A pesar que en los últimos años, desde el pago a los acreedores acordado en el Convenio de enero de 2006, la Unión Deportiva ya no disponía «de la vigilancia de los administradores concursales», sí existía cierto riesgo. «Estabas a expensas que cualquiera de los acreedores te cortase la yugular, por eso estabas en alarma. Por ejemplo, Manuel García Navarro podía en algún momento haber actuado y cerrado el kiosko», explicó en una entrevista concedida a udlaspalmas.net.

«Lo importante es que diez años, un mes y doce días después nos hemos quitado esta espada de Damocles de encima, hay que agradecérselo a la gestión hasta el momento», agregó el ex consejero amarillo.

Recuerda que al llegar al Club solo había tinieblas: «No había folios, no había gua, no había café», expone, detallando la entrada del abogado Agustín Ojeda a petición del consejero Carlos Álvarez. «Agustín empezó a reordenar la contabilidad del club, aquello era un caos: papeles por todos lados, un auténtico desastre. Agustín lo ordenó todo, nos dimos cuenta de la profundidad del agujero que se iba a los 12.000 millones de pesetas, y entonces gracias a Agustín Ojeda nos decidimos a preparar el tema para presentarnos a la Ley Concursal».

Desvela una conversación con Cobo Plana, en la primera toma de contacto entre los consejeros y el nuevo juzgado de lo Mercantil, del que Cobo era titular. «Les estaba esperando», dijo el magistrado.

En el verano de 2004 varios directivos se trasladaron a La Coruña para negociar con Augusto César Lendoiro, presidente del Deportivo, la deuda de Gabriel Schürrer —ascendía a más de 800 millones de pesetas con intereses— que estrangulaba a la entidad. Había riesgo de no inscribir al equipo, que había descendido a Segunda B. Las Palmas ya preparaba en secreto la entrada en la Ley Concursal:  «¿Fuímos a engañar a Lendoiro? No, no lo engañamos, fuímos a salvar una situación sabiendo que era una manera de sobrevivir y la manera de llegar a septiembre. La UD difícilmente hubiese podido en el año 2004 poder inscribir al equipo y menos llegar al mes de noviembre para presentarse al concurso. Hubiera supuesto la quiebra total y absoluta», explica, en referencia a no llegar a un acuerdo con Lendoiro. El club sobrevivió hasta el 4 de noviembre a duras penas: sobre la entidad pesaban numerosos embargos que limitaban completamente los movimientos. «Dentro de lo bueno que hizo García Navarro, que también hizo cosas mal, fue poner dinero para poner al club a flote en aquella época», recuerda.

La Unión Deportiva logró entrar en concurso, aunque el acreedor Iñaki Urquijo se adelantó un día para dar carácter necesario al mismo. La administración concursal comenzaba, y tomaría decisiones históricas: «Ahí Cobo Plana fue una pieza importante, en esos momentos la Ley tampoco estaba muy fogueada. Los jueces interpretaban; ahora la Ley está más que matizada y no te deja tanto interpretar como en aquella época. Una de las cosas claras que nos decía es que para poder salvar a la Unión Deportiva Las Palmas teníamos que demostrar que tenía un apoyo social detrás», desvela Romero. Sobre el Consejo de Administración que formó parte indica que «el único mérito que le doy es seguir adelante con el concurso, lo que hicimos no tiene comparación con el apoyo de la afición, sin la afición no hubiera sido posible salir adelante».

En medio de la finalización del concurso, con la Unión Deportiva saliendo a flote, sucedió el trágico partido del 22 de junio del ascenso a Primera. Para Eulogio Romero «el golpe tan mortal del partido del Córdoba ha concienciado de tal manera a la afición, que va más al Estadio, con más regularidad. Se creó en esos días en la calle un intento de la gente a aunarse, compadecerse entre ellos y darse ánimos.. eso creó que la afición se volcara más que nunca en abonarse. El palo del Córdoba ha ayudado que se produzca un cambio en la mentalidad de la afición amarilla», concluye el ex consejero.











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