Al delantero argentino únicamente le mantiene en la titularidad la falta de competencia en su puesto. Livaja, castigado ante el Betis, no ha ofrecido nada novedoso en sus participaciones. Araujo, titular en los últimos cuatro encuentros, no termina de ser determinante ni aprovechar las oportunidades.
¿Qué le pasa a Sergio Araujo? El delantero argentino de la UD Las Palmas es uno de los hombres mejor pagados de la plantilla, con mayor nivel mediático y de los que más se espera. Sin embargo, su nivel en Primera División no es todavía el esperado. Este viernes ante el Betis tuvo otra oportunidad, y una vez más la desaprovechó.
Lejos queda aquel recuerdo de un joven y fino Araujo que llegó a Gran Canaria. Donde disparaba ponía un balón con dos finales: o una intervención notoria del portero, o un grito de gol. Aquel Araujo se metió pronto a la afición en el bolsillo. Ahora, dos años después, produce disparidad entre el respetable. Su rendimiento deportivo unido a sus numerosos escándalos extradeportivos le han puesto en el centro de la diana.
Araujo ha sido titular en los últimos cuatro partidos de la Unión Deportiva Las Palmas. Villarreal, Celta de Vigo, Eibar y Real Betis. Más allá del trabajo realizado –correr, presionar, tratar de asociarse–, no ha estado fino en ninguna de ellas. Ante el Celta destacó a muchos metros del área. Pero en la zona letal, cero. Ni goles ni presencia ni chispa. Araujo no termina de arrancar.
El delantero argentino suma 530 minutos en once partidos y dos goles –uno en la goleada al Granada en la segunda jornada y otro ante el Real Madrid en la sexta fecha–. Se espera mucho más de un futbolista franquicia que, como el año pasado, no está aprovechando las numerosas oportunidades brindadas por Quique Setién.
Livaja, la extraña competencia
El inicio fulgurante de Marko Livaja –dos goles en Mestalla en la primera jornada– le hicieron poseedor del puesto de ‘9’ durante las primeras citas ligueras. El delantero croata se fue diluyendo con el paso de los encuentros, dando muestras de poca adaptación con respecto al juego del resto de sus compañeros. En muchas acciones decidía mal, o iniciaba una guerra por su cuenta.
Esta semana llegó tarde al entrenamiento del miércoles previo al choque ante Betis, una gota que colmó el vaso de la paciencia de Setién. «Necesita centrarse», indicó el técnico cántabro en rueda de prensa, aludiendo a varios ‘despistes’ del ex ariete del Rubin Kazan. Livaja es la única competencia en el puesto de nueve que está teniendo Araujo a ojos de Setién, si bien el equipo trata de tener más remate y presencia con Prince colocándose en zona de ‘9’ en determinados momentos de los partidos.
Livaja ha completado 637 minutos en LaLiga en nueve encuentros, anotando únicamente el doblete al Valencia en Mestalla. Acumula once fechas sin anotar. El pasado curso Willian José arrebató fácilmente el puesto a Sergio Araujo pasadas unas fechas debido al mal rendimiento del argentino. Hasta el momento, Livaja tampoco ha demostrado grandes cualidades ni participaciones destacables con respecto al ’10’ amarillo. El debate del delantero está más vivo que nunca. Por desgracia, por demérito de ambos.
