El Sevilla se llevó la victoria de un Estadio Gran Canaria hasta ahora inexpugnable, pero tuvo que sacar su mejor versión y además encomendarse al acierto de Sergio Rico, uno de los mejores porteros del mundo en la actualidad.
Se puede hablar de injusticia, de poco premio a un gran partido o de la gran pegada de un equipo que ya se codea entre los grandes de Europa como el Sevilla. Lo cierto es que el espectáculo que se vio sobre el césped del Gran Canaria valió el precio de la entrada y, pese a la derrota, debe dejar con un buen sabor de boca a la afición amarilla.
La UD plantó cara y durante un buen rato bailó a un plantel que por puntos está realizando la mejor campaña de su historia, que en diez días disputa los octavos de final de la Liga de Campeones. El Sevilla ganó porque es mucho Sevilla. Porque Vitolo es uno de los mejores extremos españoles a día de hoy; porque Sergio Rico es un portero llamado a disputarle la titularidad de la Selección a David De Gea; porque el talento que tenía en su banquillo decide partidos o porque el conjunto de Sampaoli está maravillosamente trabajado.
Y con todo esto del Sevilla, Las Palmas pudo e incluso mereció sacar algo de este partido. Aunque las llegadas más claras las protagonizó el cuadro andaluz, el juego desplegado por la UD demuestra que hay mucha madera para disfrutar y creer en la isla. Porque perdió, pero lo hizo ante un gran equipo y mirándole a los ojos, metiéndole el susto en el cuerpo y negándole el balón a un Sevilla que es junto al Barcelona el único equipo que acumula más posesión que los amarillos en LaLiga.
También hubo ambiente de Champions en la grada. Una de las mejores entradas que ha tenido la UD en Primera División. Colorido, calor y una afición entregada a un equipo que lo dio todo pero a veces no es suficiente para superar a un rival que te acaba superando por pequeños detalles, cuando teóricamente es bastante superior. Fue la primera derrota de la temporada liguera en Gran Canaria, pero no quita que los amarillos realizaran un enorme partido. Porque hoy la UD Las Palmas también pareció un equipo de Champions.
