Con la vitola de internacional absoluto recién estrenada, el de La Feria ha regresado a una realidad, la de la UD Las Palmas, en la que está teniendo que retrasar su posición para llevar el peso creativo en el centro del campo.
El mago está fuera de su escenario. Fuera de su hábitat. Con más piedras en la mochila de lo habitual. Jonathan Viera no está cómodo del todo y la UD lo nota. Con el de La Feria lejos de su zona de influencia, lejos de su zona de confort, los amarillos palidecen cuando tienen que mirar la portería contraria. El panorama actual está invitando al centrocampista a retrasar su posición y ayudar de más a los centrocampistas a la hora de organizar un ataque que no está consiguiendo brillar todo lo que debería.
Esa cuestión hace que el ’21’ sea menos determinante. El canterano es un verso libre y, como alma que lleva el viento, el tener que bajar tanto a recibir le resta protagonismo. Ante el Celta fue así. El mapa de calor de Viera en el choque del lunes estuvo más cerca de la línea que divide el campo que del área gallega y eso que la UD acumuló un 59% de la posesión. Por un lado le desgasta y por otro le aleja del lugar donde es letal, algo que reflejan perfectamente los números que acumula esta temporada.
El primero que sabe que Jonathan Viera es pieza clave es Pako Ayestarán. A pesar de ello, el vasco quiere que el de La Feria se involucre en la construcción del juego por una cuestión de necesidad, algo que aclaró el de Beasáin ayer en UDRadio: «Viera es muy importante para nosotros y tiene que estar involucrado en la construcción. Tiene que evolucionar estando más cerca de la creación en el centro del campo. Que las líneas de detrás le lleven la pelota es ideal, pero eso no lo tenemos ahora», comentó.
En ese sentido, el ex del Valencia intentó matizar esa sensación de ver al ’21’ en una situación que no le conviene. De esa manera, volvió desengranar sus declaraciones alegando que la situación colectiva condiciona el papel de ‘Romario’: «Al final, quieres llegar a un punto determinado de juego, pero el estado del equipo te hace tomar un camino intermedio para llegar a ese punto. A veces, los jugadores tienen que responder teniendo en cuenta la situación del equipo. Le toca bajar un poco más», explicó.
Lo que está claro es que todo el mundo en el universo amarillo quiere ver a Jonathan Viera sonreír. El centrocampista sólo necesita estar más arropado y, a partir de ahí, Las Palmas podrá crecer en el apartado ofensivo. Seguramente, si Aquilani consigue mejorar sus sensaciones y Samper va entrenando en el equipo, el de la Feria se vea más descargado y pueda desarrollar mejor su fútbol. El jugador franquicia de esta UD no debe estar solo ni cargarse de trabajo extra cuando su equipo más lo necesita.
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