Madre mía, qué pasada, después de tantos años de mediocridad y aburrimiento, ni me acordaba casi del gran Turu. Qué manera de percutir, zambombazos bestiales, regates en corto, anticipación, remates poco ortodoxos, inteligencia posicional, arte, poderío...
Posiblemente, los únicos y mejores 500 millones de pesetas (3 millones de euros) mejor y más sabiamente invertidos en toda la Historia de la UD, muy lejos de lo pagado por Wolff, Brindisi, Contreras,Morete o Carnevali.
Lo de García Remón tiene explicación: ya se ve el tremendo éxito de su carrera como entrenador, un fracasado más en la lista, lista que de nuevo hoy, encabeza otro triste técnico amarillo. Los tiros de este año se asemejan más de la cuenta al de esa época de El Gato de Odessa: equipazo sin trabajar, jugadorazos de nombre, enjundia y categoría y el tonto del pueblo en la banda incapaz de hacer una o con un canuto. Anda que no estamos muchos cansados de soportar mediocres bobalicones en el banquillo de la UD: se ve a la legua.
Es obvio indicar quien conseguiría el ascenso después: un hombre inteligente, sabio y con lo que hay que tener como Sergio Kresic.
Por cierto, la jugadona del gol ante el Albacete en nuestro Estadio Insular es una obra maestra del fútbol que merece perpetuarse en el tiempo y ser visualizada en las universidades: un regalo a los sentidos, una belleza inconmensurable, una oda al fútbol, una pincelada de Van Gogh aplicada al deporte, una sublimación de la conceptualidad plástica dentro de un deporte que muchas veces se convierte en genialidad artística, circense, cultural y apoteósica. Contemplar una jugada como esa casi llega a la altura del éxtasis que proporciona escuchar Rigoletto de Verdi en La Fenice de Venecia. Bestial!!
Bravo, bravíssimo,
Kokealca. 
Se le ve fantástico, perfecto y cuidado.
