Aquel maldito 5 de junio
Publicado: Jue Jun 05, 2014 2:57 pm
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(Foto: Juan Carlos Alonso.)
Barkero consuela a Momo tras la derrota en El Ejido.
Hoy se cumplen diez años de la derrota que condenó a Las Palmas a Segunda B. El conjunto grancanario regresó a la categoría de bronce solo dos cursos después de perder su condición de Primera y con una deuda que rondaba los 80 millones de euros que, por obligación, le convirtió en la primera entidad en acogerse a la Ley Concursal.
una derrota frente al Polideportivo Ejido (1-0) hace hoy una década, junto al triunfo del Leganés sobre el Algeciras (3-2) al día siguiente, confirmó el descenso aritmético de los amarillos el 5 de junio de 2004. Pero el desastre se había gestado mucho antes.
Tras solo sumar 8 victorias, con 14 empates y 18 derrotas, Las Palmas se hundía en el tercer escalón del fútbol nacional, circunstancia que hacía peligrar su viabilidad con cerca de 80 millones de euros de débito. Por su banquillo habían desfilado cuatro técnicos sin que ninguno hubiese podido evitar el desastre: Juan Manuel Rodríguez, David Vidal, Henri Stambouli, que dimitió días después de ser nombrado, y Tino Luis Cabrera, hombre de la casa que, finalmente, no pudo obrar el milagro al cogerle el pulso a un equipo en ruinas y moribundo.
En el estreno del representativo en el Estadio de Gran Canaria aquella temporada tras abandonar de forma forzosa el Insular, la inestabilidad institucional y una nefasta política de fichajes llevó al equipo al descenso con tres jornadas de antelación.
Con Manuel García Navarro en la poltrona, el consejo de administración apostó, sin el apoyo del presidente, por un técnico canario. Juan Manuel Rodríguez, luego solución recurrente a otras crisis deportivas, se hizo cargo de un proyecto que en sus orígenes apostaba por jugadores de la casa como Orlando Quintana, Javi Martel, Guillermo, José Antonio, Molina, Juanma, Jotha, David González, Carmelo, Aday, Alberto, Álex Castro, Ángel Sánchez, Poncho, Futre, Pedro Vega o Rubén Castro, máximo goleador de la categoría aquella temporada sin que eso evitara el descalabro.
También jugaron en aquella temporada David García, relegado después al filial por Vidal, Nauzet Alemán o Momo, protagonistas amarillos hoy una década después en Las Palmas.
La política de fichajes desconocidos como Bogliacino, Kily González, Frutos; o Sessa, Matheus, Jahic, Lindbaek y Hietanen, en un intento estos cinco últimos de reactivar al equipo a mitad de temporada, no dio resultado y solo hizo aumentar la deuda en las cuentas y la fractura en el terreno de juego.
Y aunque el propósito no era otro que salvar la categoría con holgura y merodear los puestos de ascenso en el tramo final de la temporada, las urgencias por los resultados se cobraron a la primera víctima pronto.
Tras una derrota en el Gran Canaria, y con el equipo aún fuera de descenso, Juan Manuel Rodríguez fue cesado de su cargo tras la jornada 16, el 13 de diciembre de 2013. La llegada del excéntrico David Vidal no mejoró el rendimiento del equipo y Las Palmas terminó la primera vuelta en el puesto 17, con solo dos puntos de margen con respecto al primero por la cola.
Con el equipo emponzoñado en el descenso y tras la recordada derrota en el Rodríguez López (2-0) por las inoportunas declaraciones de Rubén Castro -«quiero hundir al Tenerife»-, David Vidal es relegado de su cargo en el banquillo amarillo tras caer en Getafe (3-0) en la jornada 31.
Después de que, de forma circunstancial Tino Luis Cabrera se hiciera con el equipo la jornada siguiente -derrota 1-2 frente al Alavés- el desconocido técnico francés Henri Stambouli aceptaba el reto de salvar a Las Palmas. Días más tarde, y tras presenciar en la grada al no estar tramitada su ficha la derrota ante el Algeciras (2-0), presentó su renuncia.
De esta forma Tino Luis se convertía en el técnico titular en a falta de nueve jornadas y con reducidas opciones de éxito. Las Palmas, vigésimo primero entonces, perdió ante el Recreativo (0-4), ganó al Córdoba (1-2), empató con el Salamanca (1-1), cayó contra el Cádiz (4-1) y el Levante (2-0) y empató frente al Xerez (1-1) antes de que se consumara el descenso ante el Poli Ejido (1-0).
Luego la UD ganaría al Terrassa (2-1) y al Rayo (1-2), que también descendería con el Leganés y Algeciras, en las dos últimas jornadas y sin opciones de salvación.
