El destino ha cruzado esta temporada suertes dispares para la Unión Deportiva Las Palmas. El equipo grancanario ha fluctuado entre periodos de enormes altibajos; tal es el caso, que los mismos jugadores que estuvieron soñando con cotas más ambiciosas tras la llegada de Javier Vidales al banquillo –y con él tres victorias consecutivas ante el Celta de Vigo, Alicante y Albacete- ahora estén en una situación crítica: a un punto del descenso y con una dinámica preocupante.
A esta Unión Deportiva Las Palmas se le achaca falta de concentración en los momentos importantes, e incapacidad para rehacer sus propios errores. Un inicio del 2009 paupérrimo –una única victoria ante el Alavés el pasado 7 de marzo en doce partidos- ha colocado al conjunto amarillo al borde del abismo. Los números no dejan lugar a la réplica: 8 puntos de 36 posibles desde el inicio de año. La posición en la tabla clasificatoria –decimoctavo con 32 puntos- obligan a los amarillos a tomarse los trece partidos restantes del campeonato como auténticas finales. El objetivo, que a priori era mantener una temporada sin sobresaltos, está lleno de tensión e incertidumbres. El nuevo y definitivo reto: salvar un año tan desquiciante como ramplón.
El equipo amarillo visitará el próximo sábado al recién ascendido Girona, colocado en un meritorio duodécimo puesto con 38 puntos, y que ha hecho de El Montiliví un auténtico fortín: tan sólo el Salamanca, en la cuarta jornada, ha conseguido llevarse los tres puntos del campo gerundense. Con el Girona se juntan otras seis visitas fuera del Gran Canaria: Gimnástica de Tarragona, Tenerife, Celta de Vigo, Albacete, Córdoba y Levante. En Siete Palmas, la Unión Deportiva recibirá al Castellón, Eibar, Huesca, Alicante, Salamanca y Rayo Vallecano.
En estos trece partidos, importantes duelos con equipos que están luchando por el ascenso: Tenerife y Rayo Vallecano, en la actualidad, metidos de lleno en la pomada; y Castellón y Salamanca, en el segundo vagón, pero que han demostrado que van a luchar por el ascenso. Cuatro partidos con los de arriba, y cinco con los de debajo: Celta de Vigo, Albacete, Córdoba, Éibar y Alicante –únicamente estos dos últimos como se jugarán en Gran Canaria-.
El calendario se presenta realmente exigente para el conjunto de Javier Vidales, un equipo que necesitará, como mínimo, 18 puntos –o lo que es lo mismo, seis victorias, habiendo cosechado tan solo siete triunfos en las 29 jornadas disputadas- para evitar el descenso al pozo de la Segunda División B. Es hora de ponerse serios.
Este artículo se modificó el 09/11/2010 19:38 19:38