Su recordada melena al viento contrasta con su actual cabeza rapada. A Paco Jémez, nuevo entrenador de la Unión Deportiva, cuesta reconocerle. No sólo por su aspecto físico, lo de menos al fin y al cabo. Como defensa central destacó por su contundencia, colocación y juego aéreo. Como entrenador, en su corta experiencia, resalta su mensaje ofensivo. Busca un fútbol estético y no ha tenido miedo a las comparaciones odiosas admitiendo en su presentación que Guardiola es «un icono» para él.
No es nada nuevo. Tiene un breve currículum. Le conocen en el RSD Alcalá, el Córdoba y el FC Cartagena, donde se presentó con las mismas intenciones. Ha triunfado o «fracasado» siempre unido a su estilo. En su primera experiencia en el banquillo, en la 06/07 en Tercera División, se quedó a una eliminatoria de subir. El Girona, que poco después repetiría, le apartó de debutar con un ascenso.
La temporada siguiente, el Córdoba, el equipo de su niñez, le dio su primera y hasta ahora única oportunidad en Segunda. Allí se guarda buen recuerdo de él aunque fuera destituido a once jornadas del final. Le condenó su exceso de ambición pese a contar con una plantilla débil. Sus intenciones ofensivas contrastaban con la debilidad del equipo en defensa y perdió muchos partidos por intentar un juego más estético. No gustaban sus cambios y sus decisiones durante el partido, pues llegaron a perder 16 puntos en los minutos de descuento. Tomaba demasiados riesgos al adelantar mucho la defensa. Se le achacaba a su inexperiencia. El balance fue de 7 victorias, 15 empates y 9 derrotas. La directiva le cesó amparándose en los goles encajados, si bien 43 en 31 jornadas no son demasiados. Se le echó de menos, pues dejó al equipo a tres del descenso y se salvó, con José González, gracias al goal-average con el Ferrol después de estar incluso cuatro puntos por debajo.
Usaba un 4-4-2 con un pivote defensivo y otro ofensivo, mucho juego por las bandas y centros al área, donde contaba con la referencia de Javi Moreno. Un esquema similar al que usaría, un año después, en el FC Cartagena, equipo al que ascendió. Cogió las riendas en febrero en la segunda posición. El club destituyó a ‘Fabri‘ por su juego extremadamente defensivo, criticado por la afición, y se buscaba algo más que los resultados. Ese plus llegó con Jémez, que acabó con el equipo líder y ascendiendo a las primeras de cambio. La entidad esgrimió motivos económicos para no renovarle, aunque se rumoreaba en la ciudad que Juan Ignacio Martínez ya estaba apalabrado. Así se escribe su corto currículum como técnico. Esperemos que lo agrande en la UD Las Palmas.
Referencias de los periodistas Antonio Agredano (Córdoba) y Juanen Gonzálvez (Cartagena)