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Betis, Celta y Rayo se distancian

En una jornada marcada por la huelga de controladores —y los consiguientes largos viajes de muchos equipos, así como el aplazamiento del Tenerife-Granada— y la llegada de Abel Resino al Valladolid, Betis, Celta y Rayo Vallecano no fallaron y alargan la distancia con el cuarto. Los tres son los más sólidos de la categoría y, salvo sorpresa mayúscula, de este grupo saldrán los dos que asciendan directamente a la Liga BBVA. Y es que el Celta, tercero, aventaja ya en cinco puntos al Salamanca. El equipo charro se mide este domingo al Rayo Vallecano, una buena oportunidad para estrechar la parte alta.

El Betis no falló en Soria. Empezó perdiendo, pero remontó gracias, una vez más, a su temible pareja de ataque Emaná y Rubén Castro. El canario suma ya 10 tantos y el camerunés siete. Cifras que son el reflejo del dominio verdiblanco. Y el Rayo Vallecano, debido a la baja de su goleador Armenteros, tuvo que aparecer el otro argentino, Trejo, que anotó dos goles en dos minutos en la reanudación para batir a un correoso Girona.

Por detrás, el Salamanca cayó en el campo del Elche, que remontó el gol inicial de Juanjo. El Barcelona B empató en el Mini Estadi ante un Valladolid que anunció este domingo su nuevo entrenador. Abel, ex del Atlético de Madrid, regresa a la Liga Adelante para hacerse cargo de uno de los equipos con mejor plantilla y pese a todo bien situado. Perdió una buena ocasión el Cartagena en casa ante un Albacete que acabó con diez. Los locales tuvieron que empatar el tempranero penalti que anotó Verza. También empató en casa y contra un rival de la parte baja, la Ponferradina, el Xerez.

El Villarreal B escala varios puestos con su triunfo en el feudo de un Nástic que tiene mala pinta y es colista. Les acompañan en descenso Tenerife, con un partido menos, el Albacete y el Recreativo, que poco a poco va progresando y empató en Córdoba en un partido trepidante. Sale de esa zona el Huesca, que estrena su casillero de victorias en El Alcoraz con el Alcorcón de testigo. El partido se desequilibró pronto por una jugada de penalti y expulsión.