El sorprendente inicio de campeonato de Las Palmas Atlético ha ido evolucionando con el paso de las jornadas hasta convertirse en una realidad que le permite mantenerse como líder en solitario del grupo II de la Segunda División B, una vez superado el primer tercio de la temporada. La consistencia defensiva que emana la zaga canaria es el principal ingrediente que posible que el éxito del bloque de Víctor Afonso.
Si después de catorce partidos disputados el filial de la Unión Deportiva Las Palmas continua comandando la tabla clasificatoria de su grupo, debemos dejar considerar la vela chica como un equipo que lucha por la permanencia y comenzar a valorar la opción de que la plantilla puede optar a cotas mayores y consolidar la mejor temporada de la historia del segundo equipo amarillo en la categoría.
Lo que en un principio asombraba a propios y extraños se ha ido tornando hacia un rendimiento que casi resulta hasta natural. De hecho, aceptar que Las Palmas Atlético ha sido capaz de vencer un partido en el Anexo o puntuar a domicilio se ha convertido en algo tan cotidiano que quizá se olvide la trascendencia y la importancia del logro. Y es que en términos clasificatorios, Las Palmas Atlético es el mejor equipo filial de toda la Segunda División B, superando a los representativos de canteras tan importantes del país como la del Atlético de Madrid, Athletic Club o Villarreal, que también militan en la misma categoría.
La clave del éxito que está cosechando este grupo que dirige Víctor Afonso no es otra que la capacidad que tienen para ser determinantes en ambas áreas. En defensa el conjunto insular es uno de los más destacados, ya no sólo de su grupo, si no del conjunto de 79 equipos que conforman la Segunda B este curso, siendo es el segundo menos goleado – 8 goles en contra- sólo por detrás de La Hoya Lorca CF -7-.
Una zaga consolidada
Este dato no resulta tan extraño si analizamos en profundidad la fiabilidad que demuestra la zaga amarilla esta temporada. La línea de cuatro se recita casi de memoria y pocas son las ocasiones en las que David Simón, Carlos, Ayoze Placeres y Medina no han compartido posición de zagueros sobre el terreno de juego. Además, el papel defensivo de Jesús como mediocentro posicional, resulta fundamental para que el combinado de jóvenes talentos canarios se haya erigido en una muralla muy difícil de perforar.
Según los datos de Javier Marrero (@Javier_Marrero ) el filial está sólo dos puntos de batir su récord de puntos a domicilio en una única temporada que data de la temporada 1979/1980 – en la que el equipo además logró su mejor clasificación histórica al acabar la temporada como noveno-.
La próxima semana, la plantilla actual podría comenzar a batir las marcas que en su día registró aquel histórico combinado. Antes de eso deberá, solventar su encuentro de este fin de semana ante el CD Puerta Bonita en el Anexo al Estadio de Gran Canaria, en lo que será una nueva oportunidad de demostrar la solidez defensiva que les ha llevado hasta lo más alto.
Este artículo se modificó el 22/11/2013 14:53 14:53