CONTRACRÓNICA | Ni haciendo méritos para ello ni siendo infinitamente superior al rival. A la Unión Deportiva Las Palmas le ha mirado un tuerto en todos sus partidos fuera de casa y quizá por ello los de Quique Setién no han sido capaces de ganar aún lejos del archipélago a pesar de haberlo merecido varias veces. En El Molinón se repitió la historia: amplia superioridad del equipo amarillo pero resultado adverso al final.
Ha tenido salidas muy complicadas el conjunto grancanario en el primer tercio de competición. Vicente Calderón, Camp Nou, Santiago Bernabéu, Balaídos, Mestalla… plazas muy grandes donde pocos lograrán sacar un rendimiento en forma de puntos. Sin embargo, Las Palmas no ha hecho malos partidos en esos escenarios. Ante los tres gigantes cayó con justicia pero plantando cara y tanto ante el Celta como frente al Valencia logró empates de mérito aunque mereció más.
Lo mismo ha ocurrido en la catedral del fútbol de Gijón, donde la Unión Deportiva cuajó un fenomenal partido durante 70 minutos que quedó roto tras la expulsión de Aythami después de un clamoroso error de Culio. Antes de eso, Sanabria había adelantado a los locales en los primeros minutos y a partir de entonces y hasta el minuto clave, todo el partido fue un monólogo amarillo. Las Palmas tocaba, movía la pelota, generaba fútbol y sobrevivía ante los contragolpes de un Sporting que parecía a gusto con su fútbol rudimentario. Así llegó el gol del marroquí El Zhar y así mereció el segundo tanto el combinado canario en repetidas ocasiones durante la segunda mitad del partido.
Todo apuntaba a que era cuestión de tiempo que Las Palmas marcase el gol del triunfo pero entonces llegó el fallo de Culio, la expulsión y el desastre. En superioridad numérica el Sporting explotó la banda izquierda del fenomenal Jony que supo hacer daño ante una zaga desconocida y desarbolada. El extremo generó los dos goles restantes y Sanabria se fue del partido anotando un hat-trick sin haber hecho más que rematar lo que le llegaba.
Se repitió la historia de los partidos a domicilio: mucho dominio y poca efectividad. Enfrente, justo lo contrario: efectividad aplastante y tres puntos al saco. Otro mal resultado a fuera de casa, otra mala noticia lejos del Gran Canaria.
Este artículo se modificó el 07/12/2015 19:44 19:44