OPINIÓN | Perder nunca gusta y menos si es de forma cruel, pero el palo que todos sufrimos ante el Real Madrid después de lograr lo más difícil, haberles empatado; dolió, pero no sonrojó.
Después de una primera parte táctica, la segunda fue un regalo para los ojos de los amantes del buen fútbol. El empate fue poco para los méritos de los amarillos, pero el talonario madridista decidió en uno de los pocos fallos de los nuestros. Poco que reprocharles a los amarillos después de una década fuera de la élite y, sobre todo, de haberse dejado el alma en el terreno de juego. Si encima se venía de tres victorias seguidas, más perdón aún.
Ahora toca centrarnos en lo nuestro, en intentar pescar en Anoeta y cerrar la temporada con un mínimo de nueve puntos, que son los que daría casi la salvación. Tenemos experiencias pasadas donde todo estaba de cara y al final se lió parda, por lo que avisados estamos. Honestamente, creo que Setién y sus jugadores han sabido revertir la situación y ahora son un valor seguro. Muy mal se tendrían que dar las cosas para no estar otro año más en Primera, pero esto es fútbol y todo puede suceder. A seguir con el mismo nivel de compromiso para prolongar este actual estado de gracia.
por Rafa León
Redactor de Cadena Ser Las Palmas
Delegado en Canarias del Diario As
Este artículo se modificó el 18/03/2016 13:51 13:51