CONTRACRÓNICA | Las Palmas se impone de forma contundente al Espanyol y acaba así con las calculadoras y los viejos fantasmas del pasado, que pese a no ser generalizados, empezaban a aparecer en algunos aficionados. Sin embargo, Jonathan Viera, ausente en el Villamarín, tomó el mando y se encargó de romper cualquier calculadora.
Cuando Jonathan Viera disfruta, Las Palmas enamora. Y además el grancanario suele contagiar con la alegría de su juego, por lo que el equipo amarillo, tras una primera parte floja, ofuscados y donde el Espanyol perdonó varias ocasiones muy claras para adelantarse. No obstante, el gol de El Zhar abrió una lata que en la segunda parte fue un juguete roto en manos de un equipo desbordado por la alegría que desprende su juego.
Las Palmas hizo cuatro goles, pero pudo hacer varios más en la segunda mitad liderados por un Jonathan Viera excelso que destrozó al Espanyol, las calculadoras y todo lo que se le puso por delante. Dio el gol a El Zhar para abrir el marcador, hizo el segundo, puso el tercero en la cabeza de Bigas y dejó algunos pases de pura fantasía que no se terminaron de concretar. Lo que viene siendo una exhibición.
Aunque no fue sólo Viera el destacado. El partido de Pedro Bigas también merece mención aparte. Sólo un error y ya con 4-0 en la recta final. El gol que firma Viera lo prepara él con una galopada desde campo propio que deja atrás a tres rivales por calidad y termina con un pase con el exterior a Willian que bien pudo ser una asistencia. Se coronó posteriormente con el cabezazo a gol, segundo consecutivo en el Estadio de Gran Canaria.
Fue una fiesta completa en el estadio. Wakaso reapareció y firmó un golazo que desató el delirio en las gradas. Valerón tuvo minutos repartiendo sencillez y calidad como acostumbra. El equipo realizó jugadas de auténtica fantasía, gustó, divirtió y deja cerrada, ya sí, la permanencia en Primera División, a expensas de una derrota del Sporting en el Nou Camp para hacerla matemática. Y como no podía faltar en cualquier fiesta, la grada Naciente se mantuvo en sus asientos dando mayor alegría y pidiendo que salieran nuevamente los amarillos, algo que acabaron logrando para culminar un fin de fiesta maravilloso.
No obstante, todo esto seguramente no habría sido posible sin el liderazgo de Quique Setién. Ha llenado de autoestima a los jugadores amarillos y ha firmado un final de temporada de 22 puntos en las últimas diez jornadas, unas cifras que sólo firman equipos de zona europea. Tarde completa en Gran Canaria.
Este artículo se modificó el 23/04/2016 21:20 21:20