Un derbi canario, independientemente de su repercusión, siempre ha sido un partido de alto voltaje, y buena prueba de ello fue el encuentro que se disputó en Maspalomas. La Copa Mahou se puso de cara para el conjunto tinerfeño, haciendo lo justo para llevarse el triunfo.
El centrocampista teldense volvió para demostrar por qué el Sevilla ofrecía 8,5 millones por él. Con galones y liderazgo en la medular cuando salió en la segunda parte, Roque fue el faro de la UD y dejó acciones que demuestran que regresó al exquisito nivel que demostró durante la pasada temorada, dejando de lado el frustrado traspaso al club de Nervión.
Se encontraron en el Municipal de Maspalomas dos estilos de juego contrapuestos. Un CD Tenerife agazapado en su campo esperando para robar y salir. Y una UD Las Palmas con el mismo estilo con el que finalizó la temporada pasada, mucha posesión y paciencia para generar peligro.
Cabe destacar sobre manera la aportación de Tyronne y, especialmente, Roque Mesa, quien la afición amarilla arropó y vitoreó en cada acción del teldense. Después de largas semanas donde se hablaba de su posible salida de la entidad amarilla, demostró el compromiso que siempre le ha caracterizado.
Se pudo ver una versión de Roque muy dinámica, participativo y con muy buenos destalles de calidad. En ocasiones desesperó la presión ejecutada por los de José Luis Martí, haciendo buenas combinaciones con Vicente Gómez o Tyronne. El conjunto amarillo bailó la segunda parte al son del teldense, que recuperó varios balones y dio en varias ocasiones un respiro a sus compañeros con ese pase que nadie ve.
Este artículo se modificó el 28/07/2016 20:35 20:35