Una batalla por la posesión

Este domingo Las Palmas recibe a un Celta de Vigo en estado de plenitud y con ganas de romper su mala racha en el Estadio de Gran Canaria. Los antecedentes de la pasada temporada auguran un partido emocionante, en donde mandará la disputa por la posesión y los goles.

Quique Setién y Eduardo Berizzo son dos entrenadores que se caracterizan por el buen trato con el balón y se verán las caras en un duelo en el que el espectáculo está garantizado. La posesión del balón será una de las claves para decantar la balanza de un lado u otro. El pasado curso en Balaídos el Celta se impuso con un 64% del dominio del balón, donde Las Palmas logró conseguir un punto pese a jugar con inferioridad numérica más de 80 minutos tras la expulsión de Javi Varas (3-3). Por su parte, los amarillos consiguieron la victoria por 2-1 superando en posesión al conjunto celeste (58% para los amarillos y 42% para los vigueses) en el partido de vuelta. Otra dato a destacar son los goles. En dos encuentros, han sido 9 los tantos que han marcado. Se espera espectáculo.

El Celta es conocedor de las dificultades que tienen a la hora de jugar en Gran Canaria. La última victoria celtista se remonta al 21 de marzo de 2001. Desde entonces no se ha llevado los tres puntos en la isla. Esta vez, llegan en buen estado de forma y con la moral por las nubes tras llevarse el derbi gallego ante el Deportivo (4-1). En Europa llevan una buena racha y con bastantes posibilidades de superar la fase de grupos, y teniendo en cuenta la situación de Las Palmas hoy en día, podría ser un rival para las plazas de Europa League en LaLiga Santander. Al gran nivel en el que se encuentran, se le une la recuperación del internacional sueco Guidetti.

Por su parte, los grancanarios, sin conocer la derrota en el Estadio de Gran Canaria, intentarán romper con una racha de cinco partidos sin conseguir la victoria. A pesar de los fantasmas de las malas decisiones arbitrales –en el minuto 12 la afición prepara una ‘pañolada negra’–, se espera que el fútbol impere este domingo en el recinto de Siete Palmas. Una batalla por la posesión.