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Ridículo final (3-0)

La defensa, timorata, durante el partido en Riazor / LFP.es

La UD Las Palmas firmó este sábado otro partido espantoso, el último de un curso que ha terminado de manera lamentable. Lo mejor: el fin oficial de la temporada. 

Por fin se acabó el drama. La Unión Deportiva Las Palmas visitaba este sábado Riazor y, basándose en las últimas salidas fuera de Gran Canaria, se mascaba la tragedia por adelantado. Las Palmas es un equipo que en los últimos meses, desde el anuncio del adiós de Setién, es de lo más previsible. Y no falló dentro de la normalizada mediocridad.

El Deportivo en tres ocasiones marcó tres goles. Tres jugadas parecidas: robo, contragolpe y gol. Una situación que se repite, una y otra vez, jornada tras jornada, sin una solución ni por parte del entrenador ni por parte de los jugadores. Todos ellos se irán de vacaciones con un sabor amargo, y con la tarea por resolver. Una temporada que empezó de ensueño la han tirado por la borda. Y sin pudor.

Florin Andone se puso las botas en la primera mitad. La Unión Deportiva era la protagonista con el balón, pero sin ningún tipo de referencia como 9 ni punch en ataque. Jesé salió de inicio, y Boateng ni siquiera jugó, aquejado de un virus estomacal, según explicó Setien en rueda de prensa.

En el minuto 4 el delantero rumano aprovechó un error en la entrega de Bigas para Jonathan Viera, para plantarse solo ante Raúl Lizoain y definir ajustado al palo. El Deportivo se ponía por delante en un ambiente enrarecido, con los Riazor Blues pitando a sus jugadores y el resto de la afición recriminando la actitud al grupo ultra. Todas esas malas caras en los rostros blanquiazules se lo cambiaría la Unión Deportiva, experta en alegrar las fiestas más decadentes.

Andone aprovecharía otro contragolpe en el minuto 27 para irse con una facilidad terrible de Hélder Lopes marchándose en velocidad hacia Raúl y batiéndolo. Dos ocasiones, dos goles. Todo seguía igual para la Unión Deportiva, endeble, con poca vergüenza y menos orgullo.

Todavía fue peor. Carles Gil, en una mala salida de Raúl Lizoain, aprovecharía un regalo del guardameta grancanario para hacer el tercero y poner la guinda final a un 2017 de espanto para el conjunto amarillo.

Somnífero para acabar

La segunda parte fue con el telón bajado, los espectadores viendo una función repetida, algunos haciendo la ola en un ejercicio cómico de dos conjuntos que han terminado la temporada con la lengua fuera, lejos de sus propósitos iniciales. Decepcionando a sus parroquianos.

Andone pudo aumentar hasta en dos ocasiones el marcador. El rumano quiso lograr el hat-trick, pero se esfumó la opción, y con ella cualquier acción digna de transmitir en esta triste crónica.

No tan triste como el final de curso de un conjunto que hoy despide a Quique Setién y a la temporada 2016-2017, pero que el lunes tendrá que volver a ilusionar. Con el aliciente de hacerlo un año más en Primera División, sí, pero con la responsabilidad de mejorar y volver a conectar a un afición herida en su orgullo y amargada por el tramo final. Felices vacaciones para todos.

Deportivo de la Coruña 3-0 Unión Deportiva Las Palmas

Deportivo de la Coruña: Roef; Laure, Arribas, Albentosa, Navarro; Mosquera, Guilherme (Bergantiños, min.71); Carles Gil, Çolak, Ola John (Marlos, min.58); Andone (Fayçal, min.86). Entrenador: Pepe Mel.

Unión Deportiva Las Palmas: Raúl Lizoain; David Simón, Aythami, Bigas (David García, min.46), Helder Lopes; Hernán, Roque Mesa; Momo (Halilovic, min.77), Viera, Mateo; Jesé (Javi Castellano, min.46).. Entrenador: Quique Setién.

Goles: 1-0, Andone, min. 4; 2-0, Andone, min. 27; 3-0, Carles Gil.

Árbitro: Melero López, comité andaluz. Amonestó a los locales Fernando Navarro, Carles Gil, Emre Çolak y Mosquera; y a los visitantes Roque Mesa y Momo. Expulsó por doble amonestación a Hernán Santana.

Estadio: Estadio de Riazor, jornada trigésimo octava de LaLiga Santander. 22.000 espectadores.

Este artículo se modificó el 21/05/2017 21:39 21:39