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Aquella mancha inolvidable del descenso en Anoeta

Foto: Iván León Santiago

La Unión Deportiva Las Palmas puede cerrar su permanencia matemática en Primera División en el mismo escenario donde lloró desconsoladamente en 2002 con el inesperado descenso a Segunda División.

Nadie en la Unión Deportiva Las Palmas puede borrar de su memoria el 11 de mayo de 2002. Ni quien lo vivió en Anoeta, quien lo hizo desde el televisor o los jóvenes a los cuales le han contado ese amargo descenso. Nada hacía presagiar que el equipo de Fernando Vázquez, aquel que ganó al Real Madrid o empató en el Camp Nou, acabaría en Segunda División.

La leyenda sobre esa temporada ha aumentado según han ido pasando los años. A pesar de la gran primera vuelta y no tocar el descenso, la Unión Deportiva nunca tuvo un margen muy amplío respecto a los puestos de descenso. Acabó la primera vuelta a cuatro puntos del descenso y tras su última victoria de la temporada, contra el Villarreal en la jornada 31, Las Palmas cerraba la jornada con tres puntos más que el descenso.

Aún así, todo hacía presagiar que Las Palmas se mantendría una vez más en Primera, pero las victorias no llegaban y Las Palmas perdía continuamente con los que tenía por debajo: Rayo Vallecano, Osasuna y empató en el Insular contra el Tenerife. Ese empate hizo que los amarillos llegaran en descenso a la última jornada liguera y con la obligación de ganar a la Real Sociedad y que otros resultados le acompañasen, pero los amarillos ni siquiera ganaron en Anoeta ese 11 de mayo de 2002 a pesar de adelantarse con un gol de Jorge Larena y Las Palmas bajaría a Segunda División.

Este artículo se modificó el 04/05/2024 21:03 21:03