Yo una ves le intenté quitar una platina, aún busco mi cintura.
Piwi fue testigo xD
Zinedine Moco
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ACabreraGO
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"He cruzado océanos de tiempo para encontrarte". Esto que susurraba Drácula a su amada en la obra de Bram Stoker podría aplicarse a los aficionados de la Unión Deportiva, cuando contemplan, extasiados, las virtudes de un genio. Mucho tiempo después encuentran motivos para acercarse cada quince días al estadio de Gran Canaria. Hay atracción y también mariposas en el estómago antes de cada partido. Sensaciones que ya estaban rancias en el alma del personal. Los hinchas comienzan a enamorarse de un grupo de futbolistas liderados por un incombustible y por fin reconocido David González.
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Los focos en la Unión Deportiva Las Palmas, entre victorias y tan buen fútbol, han apuntado estas primeras semanas hacia una camada de canteranos que rebosan talento, hacia la mutación positiva que han ejecutado algunos jugadores condenados hace sólo tres meses o hacia el modelo que Paco Jémez ha impuesto como hoja de ruta. Pero entre todo eso, entre tantas buenas sensaciones, hay un futbolista que ha movido al equipo en la sombra, entre líneas, en el centro del campo, en la sala de máquinas, donde se cocinan los partidos y siempre con la pelota al pie como patrón de juego: David González.
Para que Jonathan Viera pueda zigzaguear en el área y tumbar rivales con quiebros imposibles, la pelota probablemente le llegará tras un medido pase de David González. Para que Vitolo pueda firmar un eléctrico eslalon por la banda izquierda, la pista quedará habilitada después de una asistencia imposible de David González. Para que Guayre pueda ganar la espalda de la defensa rival con un rápido desmarque, un balón llegará al hueco preciso tras un delicado toque de David González. Y para que Álvaro Cejudo pueda percutir con empeño por el carril derecho, un hábil movimiento de David González bastará para desajustar por esa zona a la zaga del adversario.
Todos sus compañeros buscan la complicidad de David González en el juego porque, en un par de toques, resuelve problemas. Y todos valoran el talento de un futbolista imprescindible para entender el buen momento del equipo amarillo. Adaptado al doble pivote por Sergio Kresic el pasado curso, valorado por el club por su profesionalidad (recientemente fue renovado por tres temporadas más), el futbolista de Las Rehoyas disfruta ahora (con 29 años) de la continuidad que se le negó siempre y que le mantuvo, casi condenado por su calidad, siempre bajo sospecha.
CONTRAPESO. Con Josico como punto de equilibrio perfecto para ejecutar, sin excesivos riesgos, los balances del equipo, David González marca el son en los partidos de la UD Las Palmas. Si el centrocampista grancanario tiene la pelota, el equipo amarillo funciona con la precisión que canta el tictac de un reloj suizo: la defensa respira con el balón lejos de sus dominios y los futbolistas ofensivos, entre combinaciones y movimientos sincronizados por una idea única para interpretar el juego, disfrutan con la búsqueda de la portería rival como único objetivo. No hay mucha más ciencia, así trabaja esta UD Las Palmas.
Y hoy, a partir de las 20.00 horas en el Mini Estadi (Gol Televisión y Canal+ Liga), ante el Villarreal B, el objeto de deseo será la pelota y la solución del dilema (la posesión del balón por parte de uno o por parte de otro equipo) marcará las posibilidades de una UD Las Palmas lanzada. Enfrente, el conjunto amarillo se topará casi con un calco de todo lo que proyecta. Como ante un espejo, se reflejará en un contrincante que no especula, que no trata al esférico como un bulto sospechoso y que busca muy arriba al rival. Todas, señas de identidad que marcan a la Unión Deportiva de Paco Jémez.
De la capacidad de David González en la batalla del centro del campo dependerán muchas de las posibilidades de victoria de la UD Las Palmas. Sin su talento a disposición del grupo, difícilmente podrán brillar otros. A él le tocará coger la pelota, atarla al pie, esquivar rivales y repartir juego. No le pierdan de vista, probablemente todo girará alrededor de él. (Martin Alonso, La Provincia)
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Los focos en la Unión Deportiva Las Palmas, entre victorias y tan buen fútbol, han apuntado estas primeras semanas hacia una camada de canteranos que rebosan talento, hacia la mutación positiva que han ejecutado algunos jugadores condenados hace sólo tres meses o hacia el modelo que Paco Jémez ha impuesto como hoja de ruta. Pero entre todo eso, entre tantas buenas sensaciones, hay un futbolista que ha movido al equipo en la sombra, entre líneas, en el centro del campo, en la sala de máquinas, donde se cocinan los partidos y siempre con la pelota al pie como patrón de juego: David González.
Para que Jonathan Viera pueda zigzaguear en el área y tumbar rivales con quiebros imposibles, la pelota probablemente le llegará tras un medido pase de David González. Para que Vitolo pueda firmar un eléctrico eslalon por la banda izquierda, la pista quedará habilitada después de una asistencia imposible de David González. Para que Guayre pueda ganar la espalda de la defensa rival con un rápido desmarque, un balón llegará al hueco preciso tras un delicado toque de David González. Y para que Álvaro Cejudo pueda percutir con empeño por el carril derecho, un hábil movimiento de David González bastará para desajustar por esa zona a la zaga del adversario.
Todos sus compañeros buscan la complicidad de David González en el juego porque, en un par de toques, resuelve problemas. Y todos valoran el talento de un futbolista imprescindible para entender el buen momento del equipo amarillo. Adaptado al doble pivote por Sergio Kresic el pasado curso, valorado por el club por su profesionalidad (recientemente fue renovado por tres temporadas más), el futbolista de Las Rehoyas disfruta ahora (con 29 años) de la continuidad que se le negó siempre y que le mantuvo, casi condenado por su calidad, siempre bajo sospecha.
CONTRAPESO. Con Josico como punto de equilibrio perfecto para ejecutar, sin excesivos riesgos, los balances del equipo, David González marca el son en los partidos de la UD Las Palmas. Si el centrocampista grancanario tiene la pelota, el equipo amarillo funciona con la precisión que canta el tictac de un reloj suizo: la defensa respira con el balón lejos de sus dominios y los futbolistas ofensivos, entre combinaciones y movimientos sincronizados por una idea única para interpretar el juego, disfrutan con la búsqueda de la portería rival como único objetivo. No hay mucha más ciencia, así trabaja esta UD Las Palmas.
Y hoy, a partir de las 20.00 horas en el Mini Estadi (Gol Televisión y Canal+ Liga), ante el Villarreal B, el objeto de deseo será la pelota y la solución del dilema (la posesión del balón por parte de uno o por parte de otro equipo) marcará las posibilidades de una UD Las Palmas lanzada. Enfrente, el conjunto amarillo se topará casi con un calco de todo lo que proyecta. Como ante un espejo, se reflejará en un contrincante que no especula, que no trata al esférico como un bulto sospechoso y que busca muy arriba al rival. Todas, señas de identidad que marcan a la Unión Deportiva de Paco Jémez.
De la capacidad de David González en la batalla del centro del campo dependerán muchas de las posibilidades de victoria de la UD Las Palmas. Sin su talento a disposición del grupo, difícilmente podrán brillar otros. A él le tocará coger la pelota, atarla al pie, esquivar rivales y repartir juego. No le pierdan de vista, probablemente todo girará alrededor de él. (Martin Alonso, La Provincia)
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RiverPlate
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AzoteAmarillo
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Partido de tercera (creo) en el Insular por la mañana (que gozada), se jugaba el derbi chico, Unión Deportiva contra el Tenerife, yo estaba en el palomar con mis amigos (¡¡¡QUE RECUERDOS!!!). Jamás olvidaré aquel partido. Aquel día conocí a un pive que llamaban el Moco. ¡¡¡QUE BAILE!!!, me acuerdo una jugada en la que David estaba en el borde del area nuestra, el portero (Creo que se llamaba Hermman o algo asi, era un chico rubito) le dió el balón... menudo golazo!!dosreis escribió:Yo le vi hacer cosas en el huracán nacional que la gente no imaginaria xD alguno de auqellos rivales va por la quinta operación de cadera. Alkorta style.eL VieJoN! escribió:Yo una ves le intenté quitar una platina, aún busco mi cintura.
Piwi fue testigo xD
El se lo guisó y se lo comió, se dejo medio equipo del Tenerife atrás.
Por cierto, me enteré que le decían el moco (no sabía su nombre, yo era un chiquillo) por la cantidad de gente de La Feria que movía ese chiquillo para ver los partidos del filial. Grande MOCO! Jamás se me olvidará aquel partido.
Edito: El portero era Heyman, que luego pasó por distintos equipos canarios
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dosreis escribió: Yo le vi hacer cosas en el huracán nacional que la gente no imaginaria ...
.Roy, replicante en Blade Runner escribió: Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. He visto regates imposibles del Moco en medio metro cuadrado...
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AzoteAmarillo
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ENORME, Pelotero, recordándonos al gran Roy Batty...pelotero escribió:dosreis escribió: Yo le vi hacer cosas en el huracán nacional que la gente no imaginaria ....Roy, replicante en Blade Runner escribió: Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. He visto regates imposibles del Moco en medio metro cuadrado...
Grande Blade Runner...
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GENIO ajajajajajjapelotero escribió:dosreis escribió: Yo le vi hacer cosas en el huracán nacional que la gente no imaginaria ....Roy, replicante en Blade Runner escribió: Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. He visto regates imposibles del Moco en medio metro cuadrado...
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TURU FLORES
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Partido de Primera Regional.Campo de tierra de los Giles.
Al descanso y con David González en el banquillo,Atlético Tenoya 1- AD Huracán 1. Nosotros tos privaos ya que el Huracán entrenado por Pipo Salamanca era líder destacadísimo.
Sale el genio en la segunda parte y ....Tenoya 1 - Huracán 6.
Tremendo descosido que nos hizo el señor González...el solito.Que puto crack.No se regateó al de la cantina por pena.
Desde ese día y al ver las cosas que hizo sobre la tierra de los Giles supe que algún día disfrutaría de su futbol desde la grada del Insular.
Al descanso y con David González en el banquillo,Atlético Tenoya 1- AD Huracán 1. Nosotros tos privaos ya que el Huracán entrenado por Pipo Salamanca era líder destacadísimo.
Sale el genio en la segunda parte y ....Tenoya 1 - Huracán 6.
Tremendo descosido que nos hizo el señor González...el solito.Que puto crack.No se regateó al de la cantina por pena.
Desde ese día y al ver las cosas que hizo sobre la tierra de los Giles supe que algún día disfrutaría de su futbol desde la grada del Insular.
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Puto amo.pelotero escribió:dosreis escribió: Yo le vi hacer cosas en el huracán nacional que la gente no imaginaria ....Roy, replicante en Blade Runner escribió: Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. He visto regates imposibles del Moco en medio metro cuadrado...
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siete_estrellas_verdes
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LA BANDA DEL MOCO
El moco ya tiene galones. Ayer no hizo más que confirmar que esta temporada hay David González para rato, que ya no es aquel jugador de un sólo partido brillante o un par de jugadas endiabladas para levantar el aplauso fácil. Ahora, cuando las circunstancias lo requieren y más exigente se pone el público, saca la batuta y pone a la banda a tocar. La suerte de este año es que, además, su banda toca muy bien. Transcurría el partido por el sendero de la desidia musical marcada por el Granada, un rival que jugó como se le juega al Barcelona en Primera División (salvando las distancias, naturalmente), melódicamente plano. Media hora de concierto y la UD Las Palmas no había logrado afinar aún sus instrumentos. Fue entonces cuando el moco se puso de pie, golpeó la batuta contra el vaso de cristal para que los músicos atendieran a la pauta, al más puro estilo Luis Cobos pero con algo menos de pelo y más músculo, y distribuyó las partituras a cada uno.
Comenzó a sonar la música de los primeros conciertos, sin contar con que, una sóla voz en contra en el lugar del espectáculo puede, a veces, empañar la velada. Esa voz fue Roberto, el guardameta del Granada que con sus gritos estropeó la fiesta. La vez más evidente a un remate a bocajarro de Josico. Parecía imposible que Roberto pudiera detener ese balón, porque prácticamente no tenía tiempo de reacción. Lo cazó por el oído. Escuchó por dónde sonaba el esférico para, con un poco de suerte también, convertirlo en silencio. Rugió entonces el estadio de Gran Canaria y el moco se envalentonó ante su público. Tres o cuatro acciones de tiralíneas, musicales, para dejar el sonido de su fútbol, latente, a la espera del segundo acto. Camino de túnel de vestuarios, al finalizar la primera parte, el público fue generoso con la banda. Merecida ovación.
Un poco de agua al descanso y de nuevo a tocar. Tocar y tocar el balón para romper el silencio del Granada. Vitolo y Jonathan Viera, dos concertistas sublimes para la música amarilla, sacaron a relucir sus violines solistas. No fue el mejor dia de Vitolo, pero su potencia física hace que todo lo que toque se convierta en peligro constantemente. Y Jonathan Viera, tan delgado, tan poca cosa, que parece que se va a romper de un momento a otro. Sin embargo es capaz de hilvanar acciones sobre un campo de fútbol de la misma manera que el mejor de los stradivarius se merienda las notas de una partitura. La banda del moco tiene también músculo, contrabajo. Josico asume su papel de veterano con una naturalidad de juvenil. trabaja para dejar limpio el escenario y, cuando David González lo requiere para actuar de solista, se mete en el área.
Ante el Villareal B marcó un gol de cabeza que abrió el camino del triunfo; ayer estuvo a punto de repetir la gesta, pero lo impidió un gran Roberto, el portero del Granada. El moco es el director de la banda pero David García el capitán. Siempre en labores farragosas, mantiene la retaguardia afinada. Menos en una ocasión, la que costó el empate del Granada, en una jugada de estrategia. Discurría el partido por el pentagrama dibujado por Jémez cuando un despiste en el lanzamiento de una falta, con el partido perfectamente afinado, hizo que se escuchara el sonido de las redes de la portería de Barbosa. El ruido que nunca quiere escuchar el portero. La mejor versión de Ruymán también salió a relucir ayer, cuando el moco le dio la entrada en un par de ocasiones en la primera mitad. Mereció el gol el jugador grancanario. Y en vista de que sus violines no tenían su mayor grado de inspiración, fue le propio David González, el moco, el director de esta banda compuesta por Jémez, el que deleitó al público con un [/b]recital de lanzamiento a portería sin dejar caer el balón al suelo. La banda suena muy bien, aunque un despiste empañó el concierto.
(Pedro Guerra, La Provincia)
Sublime.
El moco ya tiene galones. Ayer no hizo más que confirmar que esta temporada hay David González para rato, que ya no es aquel jugador de un sólo partido brillante o un par de jugadas endiabladas para levantar el aplauso fácil. Ahora, cuando las circunstancias lo requieren y más exigente se pone el público, saca la batuta y pone a la banda a tocar. La suerte de este año es que, además, su banda toca muy bien. Transcurría el partido por el sendero de la desidia musical marcada por el Granada, un rival que jugó como se le juega al Barcelona en Primera División (salvando las distancias, naturalmente), melódicamente plano. Media hora de concierto y la UD Las Palmas no había logrado afinar aún sus instrumentos. Fue entonces cuando el moco se puso de pie, golpeó la batuta contra el vaso de cristal para que los músicos atendieran a la pauta, al más puro estilo Luis Cobos pero con algo menos de pelo y más músculo, y distribuyó las partituras a cada uno.
Comenzó a sonar la música de los primeros conciertos, sin contar con que, una sóla voz en contra en el lugar del espectáculo puede, a veces, empañar la velada. Esa voz fue Roberto, el guardameta del Granada que con sus gritos estropeó la fiesta. La vez más evidente a un remate a bocajarro de Josico. Parecía imposible que Roberto pudiera detener ese balón, porque prácticamente no tenía tiempo de reacción. Lo cazó por el oído. Escuchó por dónde sonaba el esférico para, con un poco de suerte también, convertirlo en silencio. Rugió entonces el estadio de Gran Canaria y el moco se envalentonó ante su público. Tres o cuatro acciones de tiralíneas, musicales, para dejar el sonido de su fútbol, latente, a la espera del segundo acto. Camino de túnel de vestuarios, al finalizar la primera parte, el público fue generoso con la banda. Merecida ovación.
Un poco de agua al descanso y de nuevo a tocar. Tocar y tocar el balón para romper el silencio del Granada. Vitolo y Jonathan Viera, dos concertistas sublimes para la música amarilla, sacaron a relucir sus violines solistas. No fue el mejor dia de Vitolo, pero su potencia física hace que todo lo que toque se convierta en peligro constantemente. Y Jonathan Viera, tan delgado, tan poca cosa, que parece que se va a romper de un momento a otro. Sin embargo es capaz de hilvanar acciones sobre un campo de fútbol de la misma manera que el mejor de los stradivarius se merienda las notas de una partitura. La banda del moco tiene también músculo, contrabajo. Josico asume su papel de veterano con una naturalidad de juvenil. trabaja para dejar limpio el escenario y, cuando David González lo requiere para actuar de solista, se mete en el área.
Ante el Villareal B marcó un gol de cabeza que abrió el camino del triunfo; ayer estuvo a punto de repetir la gesta, pero lo impidió un gran Roberto, el portero del Granada. El moco es el director de la banda pero David García el capitán. Siempre en labores farragosas, mantiene la retaguardia afinada. Menos en una ocasión, la que costó el empate del Granada, en una jugada de estrategia. Discurría el partido por el pentagrama dibujado por Jémez cuando un despiste en el lanzamiento de una falta, con el partido perfectamente afinado, hizo que se escuchara el sonido de las redes de la portería de Barbosa. El ruido que nunca quiere escuchar el portero. La mejor versión de Ruymán también salió a relucir ayer, cuando el moco le dio la entrada en un par de ocasiones en la primera mitad. Mereció el gol el jugador grancanario. Y en vista de que sus violines no tenían su mayor grado de inspiración, fue le propio David González, el moco, el director de esta banda compuesta por Jémez, el que deleitó al público con un [/b]recital de lanzamiento a portería sin dejar caer el balón al suelo. La banda suena muy bien, aunque un despiste empañó el concierto.
(Pedro Guerra, La Provincia)
Sublime.