... escribió:Por cierto, me resulta muy curioso que vaya más a ver al Tenerife yendo colista con el peor arranque de temporada de su historia que al EGC con el equipo en ascenso, jugando uno de los mejores fútbol de la categoría y con el deseo de gran cantidad de aficionados durante muchos años: un equipo de canteranos.
Sin duda, bofetada sin manos para aquellos que menosprecian continuamente a la afición del CDT, aunque lejos de reconocer dicha realidad, los fanáticos seguirán inventado teorías disparatadas, como la que
hoy hace unos días: "no es que la afición de Las Palmas sigue pensando en que el objetivo es el descenso, por eso no va al estadio, cuando se superen los 50 puntos, irás más gente".
Abro paraguas

Supongo que querrás decir "como la que
oí hace unos días".
Pues no sé dónde la oíste, pero yo no la he oído en ningún sitio y me parece un argumento infantil por llamarlo de alguna forma.
El que no me parece un argumento infantil, sino todo lo contrario, realista, es el de que el CD Tenerife tiene muchísimos abonados. Me gustaría ver qué hubiera pasado con muchos miles de aficionados si no se hubieran abonado, engaňados por la campaňa de abonados con el lema "En menos de lo que esperas, estaremos en Primera".
Y omitir u olvidar casualmente esto, Tres Puntos, es pretender tomarnos por imbéciles a todos los que te leemos.
Omitir que venir de Primera División y tener una plantilla a priori “galáctica” para la Segunda División no es el principal condicionante de tan buenos registros en el Heliodoro, es querer tomarnos por tontos. Porque si no estás de acuerdo conmigo podríamos remontarnos a otras temporadas en las que tu equipo ha estado deambulando por la media tabla (y por tanto en una situación sustancialmente mejor que la actual), y la afluencia de público era muy discreta.
Y ya compararlo a un equipo con una dinámica tan triste como la de la UD, que en los cuatro aňos que lleva en la categoría de plata ha tenido problemas para salvarse EN TODOS, pues es para descojonarse de ti.
Resumiendo, comparamos ventas de abonos de uno y otro equipo, y se ve a una afición ilusionada que ve que tiene mejor plantilla que cuando estaba en Primera, y a otra quemada y aburrida de tanto sufrir.
Comparamos ventas de localidades de uno y otro, y también se ve la realidad: unos aficionados que si no se abonaron cuando se pensaba que estarían en Primera en diciembre, menos van a ir ahora que empiezan a pensar en que la permanencia no está del todo mal, y a otros que ven que la UD, independientemente de los resultados, vuelve a recuperar su estilo de juego, por lo cual se enganchan al equipo de tal manera que muchos de ellos lamentan ahora tener que esperar tres semanas para volver a verlos en vivo.
Por eso te digo, no me gusta que me tomen por tonto.