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Vuelvo a reiterar que empezar a sacar del equipo titular a Valerón sería el primer craso error de la temporada.

En la primera parte tuvimos el balón, lo manejamos, y eso es lo que se requiere en los partidos, que te adueñes de ellos desde el principio, para que no lo haga el equipo contrario. De hecho, es verdad que no tuvimos grandes ocasiones, pero el Girona tampoco. En la segunda parte sacamos a Valerón para darle rapidez al juego, y ahí fue cuando funcionó, pero recordemos que ahí fue también cuando el Girona facilmente nos podría haber empatado, porque tuvo varias oportunidades.

Si no metemos a Valerón de inicio lo que conseguiremos es pasarnos toda la primera parte luchando por conseguir el balón (lo conseguiremos o no) y en la segunda estaremos cansados (a lo mejor el equipo contrario también, pero no nos podemos arriesgar) y entonces ¿Qué haremos? ¿Meter a los rapidos? El equipo contrario puede hacer lo mismo...

Creo que empezar a renegar de Valerón es un error, y no lo digo por ser quien es, sino por jugar como juega...nos viene de maravilla...junto con Masoud, Apoño, Nauzet, Vicente, tocan, tocan, tocan....e incluso si te descuidas te pueden hacer un gol en la primera parte. Eso sí, luego en la segunda los cambios de matan

Y yo vuelvo a estar de acuerdo con esto que dice piocanario.
Si no sacamos a Valerón y nos dedicamos a correr habría pasado lo siguiente:
- Le damos la bola al Girona.
- En vez de llegar dos veces nos llegan diez.
- A lo mejor en una contra marcamos (o no).

Creo que conviene recordar que ya no tenemos ni a Thievy ni a Vitolo.
Pero bueno, por probar... Aunque (afortunadamente) Lobera no está tan loco como para hacer eso.

Hay que tener en cuenta que el rival se pegó los primeros 45' persiguiendo un fantasma (el balón) y en la segunda parte acusaron ese esfuerzo.

El problema de la lentitud en el ataque no es Valerón, al contrario, Valerón es capaz de darle rapidez jugando a la primera. La falta de rapidez viene porque no hay interiores rápidos sino técnicos (Masoud, Nauzet), y porque no hay un punta que haga buenos desmarques y tenga loca a la defensa (Tato).

Aranda es el mejor atacante que que tenemos, con movimientos inteligentes y constantes. Masoud sin ser especialmente rápido sí tiene desborde. El que no me cuadra aquí es Nau, al que cambiaba por Asdrubal a la de ya. Probar a Tana en la posición de Valerón es una buena opción, pero aún le queda al canterano.

Coincido con el compañero en que Valerón aporta lo suyo y quizá lo que le está faltando sea ese último pase matador, pero aparte de eso el contar con posesión en la medular es importantísimo para que no te lleguen cada dos por tres.
El retoque sería sustituir a Tato, que es lento, sin calidad remarcable, y no creo que sirva para jugar solo en punta, aunque puede que sea aprovechable como segundo delantero en determinados momentos. Se puede optar por Aranda cuando esté recuperado, Delev o Máyor, o Macky.
No veo a Tato en el equipo, para cuarto delantero (no para Lobera, para él parece de sus primeras opciones, cosa que ni entiendo ni comparto) mejor dar oportunidad a alguien del filial, Artiles por ejemplo.

Yo creo que ahora sí se están haciendo las cosas con coherencia, inteligencia y astucia. Los partidos duran 90 y pico minutos, y aquí, tanto en segunda como en primera, excepto los dos o tres ya sabidos, todos están muy parejos. En segunda hay diferencias en cuanto a calidad, como por ejemplo este año sucede con la UD: mucha calidad, empaque, oficio, experiencia, jugadores con mucho recorrido en primera y con selecciones nacionales, que, por consiguiente, ofrecen recursos que futbolistas de segunda b no poseen. Pero en cuanto un equipito se arma más o menos defensivamente, complica a cualquiera. Bien, en consecuencia, tal y como tantos y tantos equipos han hecho durante décadas en segunda, conviene tomarse los partidos con paciencia, madurarlos, marearlos, y para ello es la UD, probablemente, el mejor equipo en segunda para hacerlo, al contar con un puñado de auténticos expertos en ello: Valerón, Apoño, Massoud, Nauzet (por calidad, no por rendimiento) y un acompañante discreto pero cada vez más eficaz como Vicente.

Me parece perfecto. El debate de Valerón ni lo contemplo: si se fijan, es el más rápido de todos, porque antes de recibir el balón ha realizado una mirada de centésimas de segundo para al contactar con él, ya saber donde lo desplaza. Si a ello se le une la calidad del golpeo y la precisión casi quirúrjica, la discusión la cierra el propio Juan Carlos. La idea de Lobera es, ahora sí, espléndida, inteligente y sabia: mareas la perdiz una hora, tienes posesión, haces un partido lento, trabado e, incluso aburrido, pero, de primeras, no te hacen casi ni una ocasión, no te gastas fisicamente, todo lo contrario que al rival, y transcurre una buena parte del partido en encefalograma plano.

A partir de un momento dado, se activa otro plan, se cambian las características de algunos futbolistas y el efecto es el cambio de paradigma en el partido: el equipo lento, controlador, posesivo, rocoso y aburrido, se transforma en cuestión de segundos en una escuadra supersónica, que en tres pases llega de su propia área a la contraria, contragolpea de libro y llega a puerta contraria con el rival descolocado, con huecos por todos lados y con ventaja en casi todos los balones. La velocidad, presión y desborde de los relevos, hace el resto. El partido tan largo, esos 90 y pico minutos, demasiados para estar corriendo, presionando y desgastándote sin que suponga llegar al minuto 70 con la lengua fuera, se ha convertido en un minipartido de 25 minutos, suficiente para crear 4 o 5 ocasiones que son medio gol, muy claras, manos a manos con el portero y espacios hasta para vacilar al contrario.

Creo que el último entrenador que nos enseñó esa inteligencia fue un perro viejo del fútbol, que dispuso ese año de una plantilla que le permitía hacerlo: Sergio Kresic, que nos devolvería a primera con un estilo muy peculiar, en los que, en la mayoría de partidos fuera de casa, matabas al rival en los últimos 15-20 minutos, después de haberte pasado más de una hora bostezando.

En este caso, el fin justifica los medios. Es la lectura que hago. Además estos jugadores, cuando se lo propongan, también serán capaces de florituras, espectáculo y jugadas de cara a la galería, que es lo que gusta y lo que vende. Pero eso, cuando haya partidos con clara ventaja. Antes de eso, seriedad, concentración, hechuras, rigor táctico y defensivo, inteligencia y ambición.

Pues mira, como ayer.

Morete-Markov. escribió:Yo creo que ahora sí se están haciendo las cosas con coherencia, inteligencia y astucia. Los partidos duran 90 y pico minutos, y aquí, tanto en segunda como en primera, excepto los dos o tres ya sabidos, todos están muy parejos. En segunda hay diferencias en cuanto a calidad, como por ejemplo este año sucede con la UD: mucha calidad, empaque, oficio, experiencia, jugadores con mucho recorrido en primera y con selecciones nacionales, que, por consiguiente, ofrecen recursos que futbolistas de segunda b no poseen. Pero en cuanto un equipito se arma más o menos defensivamente, complica a cualquiera. Bien, en consecuencia, tal y como tantos y tantos equipos han hecho durante décadas en segunda, conviene tomarse los partidos con paciencia, madurarlos, marearlos, y para ello es la UD, probablemente, el mejor equipo en segunda para hacerlo, al contar con un puñado de auténticos expertos en ello: Valerón, Apoño, Massoud, Nauzet (por calidad, no por rendimiento) y un acompañante discreto pero cada vez más eficaz como Vicente.

Me parece perfecto. El debate de Valerón ni lo contemplo: si se fijan, es el más rápido de todos, porque antes de recibir el balón ha realizado una mirada de centésimas de segundo para al contactar con él, ya saber donde lo desplaza. Si a ello se le une la calidad del golpeo y la precisión casi quirúrjica, la discusión la cierra el propio Juan Carlos. La idea de Lobera es, ahora sí, espléndida, inteligente y sabia: mareas la perdiz una hora, tienes posesión, haces un partido lento, trabado e, incluso aburrido, pero, de primeras, no te hacen casi ni una ocasión, no te gastas fisicamente, todo lo contrario que al rival, y transcurre una buena parte del partido en encefalograma plano.

A partir de un momento dado, se activa otro plan, se cambian las características de algunos futbolistas y el efecto es el cambio de paradigma en el partido: el equipo lento, controlador, posesivo, rocoso y aburrido, se transforma en cuestión de segundos en una escuadra supersónica, que en tres pases llega de su propia área a la contraria, contragolpea de libro y llega a puerta contraria con el rival descolocado, con huecos por todos lados y con ventaja en casi todos los balones. La velocidad, presión y desborde de los relevos, hace el resto. El partido tan largo, esos 90 y pico minutos, demasiados para estar corriendo, presionando y desgastándote sin que suponga llegar al minuto 70 con la lengua fuera, se ha convertido en un minipartido de 25 minutos, suficiente para crear 4 o 5 ocasiones que son medio gol, muy claras, manos a manos con el portero y espacios hasta para vacilar al contrario.

Creo que el último entrenador que nos enseñó esa inteligencia fue un perro viejo del fútbol, que dispuso ese año de una plantilla que le permitía hacerlo: Sergio Kresic, que nos devolvería a primera con un estilo muy peculiar, en los que, en la mayoría de partidos fuera de casa, matabas al rival en los últimos 15-20 minutos, después de haberte pasado más de una hora bostezando.

En este caso, el fin justifica los medios. Es la lectura que hago. Además estos jugadores, cuando se lo propongan, también serán capaces de florituras, espectáculo y jugadas de cara a la galería, que es lo que gusta y lo que vende. Pero eso, cuando haya partidos con clara ventaja. Antes de eso, seriedad, concentración, hechuras, rigor táctico y defensivo, inteligencia y ambición.

Pues mira, como ayer.

De acuerdo en lo que expones, pero si se nos adelantan en el marcador, como el día del Depor, se viene abajo el planteamiento.

Avalancha escribió:

Morete-Markov. escribió:Yo creo que ahora sí se están haciendo las cosas con coherencia, inteligencia y astucia. Los partidos duran 90 y pico minutos, y aquí, tanto en segunda como en primera, excepto los dos o tres ya sabidos, todos están muy parejos. En segunda hay diferencias en cuanto a calidad, como por ejemplo este año sucede con la UD: mucha calidad, empaque, oficio, experiencia, jugadores con mucho recorrido en primera y con selecciones nacionales, que, por consiguiente, ofrecen recursos que futbolistas de segunda b no poseen. Pero en cuanto un equipito se arma más o menos defensivamente, complica a cualquiera. Bien, en consecuencia, tal y como tantos y tantos equipos han hecho durante décadas en segunda, conviene tomarse los partidos con paciencia, madurarlos, marearlos, y para ello es la UD, probablemente, el mejor equipo en segunda para hacerlo, al contar con un puñado de auténticos expertos en ello: Valerón, Apoño, Massoud, Nauzet (por calidad, no por rendimiento) y un acompañante discreto pero cada vez más eficaz como Vicente.

Me parece perfecto. El debate de Valerón ni lo contemplo: si se fijan, es el más rápido de todos, porque antes de recibir el balón ha realizado una mirada de centésimas de segundo para al contactar con él, ya saber donde lo desplaza. Si a ello se le une la calidad del golpeo y la precisión casi quirúrjica, la discusión la cierra el propio Juan Carlos. La idea de Lobera es, ahora sí, espléndida, inteligente y sabia: mareas la perdiz una hora, tienes posesión, haces un partido lento, trabado e, incluso aburrido, pero, de primeras, no te hacen casi ni una ocasión, no te gastas fisicamente, todo lo contrario que al rival, y transcurre una buena parte del partido en encefalograma plano.

A partir de un momento dado, se activa otro plan, se cambian las características de algunos futbolistas y el efecto es el cambio de paradigma en el partido: el equipo lento, controlador, posesivo, rocoso y aburrido, se transforma en cuestión de segundos en una escuadra supersónica, que en tres pases llega de su propia área a la contraria, contragolpea de libro y llega a puerta contraria con el rival descolocado, con huecos por todos lados y con ventaja en casi todos los balones. La velocidad, presión y desborde de los relevos, hace el resto. El partido tan largo, esos 90 y pico minutos, demasiados para estar corriendo, presionando y desgastándote sin que suponga llegar al minuto 70 con la lengua fuera, se ha convertido en un minipartido de 25 minutos, suficiente para crear 4 o 5 ocasiones que son medio gol, muy claras, manos a manos con el portero y espacios hasta para vacilar al contrario.

Creo que el último entrenador que nos enseñó esa inteligencia fue un perro viejo del fútbol, que dispuso ese año de una plantilla que le permitía hacerlo: Sergio Kresic, que nos devolvería a primera con un estilo muy peculiar, en los que, en la mayoría de partidos fuera de casa, matabas al rival en los últimos 15-20 minutos, después de haberte pasado más de una hora bostezando.

En este caso, el fin justifica los medios. Es la lectura que hago. Además estos jugadores, cuando se lo propongan, también serán capaces de florituras, espectáculo y jugadas de cara a la galería, que es lo que gusta y lo que vende. Pero eso, cuando haya partidos con clara ventaja. Antes de eso, seriedad, concentración, hechuras, rigor táctico y defensivo, inteligencia y ambición.

Pues mira, como ayer.

De acuerdo en lo que expones, pero si se nos adelantan en el marcador, como el día del Depor, se viene abajo el planteamiento.

Justo iba a decir lo mismo pero te me has adelantado

Morete-Markov escribió:El debate de Valerón ni lo contemplo: si se fijan, es el más rápido de todos, porque antes de recibir el balón ha realizado una mirada de centésimas de segundo para al contactar con él, ya saber donde lo desplaza. Si a ello se le une la calidad del golpeo y la precisión casi quirúrjica, la discusión la cierra el propio Juan Carlos.

+1
Mi padre, q.e.p.d., siempre lo decía: Valerón no corre, es más inteligente que eso, ¿para qué correr pudiendo hacer correr el balón? Y mira que, como suele ser usual entre los canarios, era muy exigente con los canarios... Pero ver a Valerón lo dejaba siempre con una sonrisa de satisfacción. Y es recuperar el fútbol canario. Al parecer eso es lo que pasaba con la gran UD de los 70, movían el balón hasta que el rival acababa harto.
Valerón parece que es lento en sus movimientos pero realmente es el más rápido por la velocidad a la que mueve el balón. Y no solo es eso, es la capacidad de leer el partido, darle criterio al juego, la efectividad en el pase y que siempre sepa donde colocarse para ayudar a salir de una situación complicada a un compañero, recibir melones y devolver ramos de flores, como diría Joaquín.
Para mi tampoco hay debate, a menos que le hayan escayolado la pata... Debe estar presente.

Se està mejorando en defensa que es fundamental,para crecer desde ahi,hace falta que Apoño,Massoud alcancen un mejor tono fisico y la mejoria serà grande,si se consigue que Nauzet empiece a rendir mas,pues mucho mejor,el experimento Tato para tenerlo en punta mientras los "talentosos" duermen el partido,no me convence.
En el debate de Valeròn ni entro,solo hay que verlo tocar de primera y eso es la verdadera velocidad,ahora que si el otro hace los desmarques al revès,a ver si se recuperan Aranda y Macky y probamos con ellos,y si no ahi està Asdrubal.

Avalancha, si se nos adelantan en el marcador, como a todos los equipos, tienes dos opciones: seguir igual, para no encajar un segundo y seguir con la idea, o cambiar sobre la marcha no a jugadores, sino la intención con las órdenes precisas desde la banda, porque el nivel de estos jugadores lo permite. Porque estos mismos futbolistas jugando de local, cambian el chip y ponen en marcha otras variantes. Creo que ese,es el mayor lujo de este año, las infinitas posibilidades, la cantidad de variables que en un mismo partido puedes ejecutar.

Y con la dificultad añadida para un contrario que, por mucho que te estudie, nunca sabe a ciencia cierta cual de las variables vas a utilizar ese dia. Saldrá o no, pero tenerlo, se tiene, creo, vamos.

Curioso que cuando entraron Delev y Assdrubal perdimos mucha posesión, ganamos con una contra, porque el juego elaborado se acabó cuando Valeron fue cambiado. Dudar de Valeron me parece un error, ahora mismo con los compañeros que tiene si puede jugar a lo que sabe, ahora que puedes tener más posesión gracias a los Masoud y Apoño, incluso Vicente ya lo meto también, piensan en quitar a Valeron¿¿¿¿¿¿ Pero qué...??? Valeron se hace grande cuando se tiene la bola, hay que aprovecharlo ahora

Se esta en el camino de la mejora y lograr un sistema de juego acorde a esta plantilla. Importante victoria para seguir cogiendo moral y confianza. A seguir trabajando para pulir los defecto y corregirlos. Pero coño como cambia la moral cuando el equipo gana ,convence y parece que toma estilo.
Yo me alegro por un jugador en particular por Vicente Gomez, creo que va creciendo y con la aportación de Apoño el medio campo a ganado mucho, mucha suerte Vicente.

TONI.UD escribió:Pero coño como cambia la moral cuando el equipo gana ,convence y parece que toma estilo.

Y cómo cambia el foro, apenas hay comentarios sobre el partido de ayer. Si llegamos a perder iríamos por las 30 páginas.

Jimmy McNulty escribió:

TONI.UD escribió:Pero coño como cambia la moral cuando el equipo gana ,convence y parece que toma estilo.

Y cómo cambia el foro, apenas hay comentarios sobre el partido de ayer. Si llegamos a perder iríamos por las 30 páginas.

Espera que perdamos o empatemos de nuevo, no te impacientes.

Sergio-R escribió:

Jimmy McNulty escribió:

TONI.UD escribió:Pero coño como cambia la moral cuando el equipo gana ,convence y parece que toma estilo.

Y cómo cambia el foro, apenas hay comentarios sobre el partido de ayer. Si llegamos a perder iríamos por las 30 páginas.

Espera que perdamos o empatemos de nuevo, no te impacientes.

Pues sólo cabe desear que por mucho tiempo no se lleguen a rebasar las 20 páginas. Eso significaría que no habríamos dejado de sumar de tres en tres.