Re: David Simon,....
Publicado: Mié Sep 21, 2016 1:02 pm
Hizo una gran temporada 2014/2015, el sistema de Herrera se apoyaba más en rápidas transiciones que no solían desaprovechar sus desmarques, mientras en defensa un Nauzet poco exigido apenas ayudaba en la cobertura y se dejaba las correcciones al doble pivote que formaban Hernán y Javi Castellano en el eje.
Aquí lo enterraron algunos cuando ya jugaba infiltrado por las molestias de espalda, sobretodo en el mítico partido en el que forma Juan Carlos Valerón de MCD en un doble pivote por su lado (haciendo de Vicente) y David García había vuelto al central derecho. Sendas pérdidas de balón, una del central y otra que no acierta a rebañar el Palanca, supusieron goles cuya responsabilidad se hizo recaer (aunque no por parte de todo el foro) sobre David Simón, que fue el único que se echó la carrera e incluso alcanzó a tirarse al suelo ante el centro, aunque sin éxito. Los mas originales también la tomaron con Bigas por no acertar a despejar un balón en línea de gol.
Me parece significativo que los mismos que arremeten contra el lateral se apoyen en glorificar —ahora que las jugadas se difuminan— al capitán (muy lejos entonces de su actual forma y maneras) que no estuvo donde tenía que estar y fue el causante de graves errores en la salida.
Nadie puede negar que desde que David García salió del área nos ahorramos muchos errores no forzados y algún que otro penalty, lo que cambió nuestra historia.
Se puede insistir en denunciar fallas en el juego de un jugador con el deseo de que las cambie. El capitán es el mejor ejemplo de que adaptarse a un nuevo sistema es más cuestión de tiempo (confianza) y cabeza (confianza) que de otra cosa.
David Simón, en un equipo de posesión estática que siempre la pasaba al pie, poco tenía que hacer en ataque, amén de contar con escasa cobertura en defensa. Lo mismo le pasaría a Nili y a Michel. Macedo tiene mejor pie y un físico similar, pero en labores defensivas depende igualmente del equilibrio que alcance el equipo.
Es un disparate cargar ahora contra el lateral, la posición mejor cubierta de la plantilla, con un Dani Castellano y un Macedo descomunales y un Hélder y un David Simón esperando su oportunidad. Son ganas de agonías.
Aquí lo enterraron algunos cuando ya jugaba infiltrado por las molestias de espalda, sobretodo en el mítico partido en el que forma Juan Carlos Valerón de MCD en un doble pivote por su lado (haciendo de Vicente) y David García había vuelto al central derecho. Sendas pérdidas de balón, una del central y otra que no acierta a rebañar el Palanca, supusieron goles cuya responsabilidad se hizo recaer (aunque no por parte de todo el foro) sobre David Simón, que fue el único que se echó la carrera e incluso alcanzó a tirarse al suelo ante el centro, aunque sin éxito. Los mas originales también la tomaron con Bigas por no acertar a despejar un balón en línea de gol.
Me parece significativo que los mismos que arremeten contra el lateral se apoyen en glorificar —ahora que las jugadas se difuminan— al capitán (muy lejos entonces de su actual forma y maneras) que no estuvo donde tenía que estar y fue el causante de graves errores en la salida.
Nadie puede negar que desde que David García salió del área nos ahorramos muchos errores no forzados y algún que otro penalty, lo que cambió nuestra historia.
Se puede insistir en denunciar fallas en el juego de un jugador con el deseo de que las cambie. El capitán es el mejor ejemplo de que adaptarse a un nuevo sistema es más cuestión de tiempo (confianza) y cabeza (confianza) que de otra cosa.
David Simón, en un equipo de posesión estática que siempre la pasaba al pie, poco tenía que hacer en ataque, amén de contar con escasa cobertura en defensa. Lo mismo le pasaría a Nili y a Michel. Macedo tiene mejor pie y un físico similar, pero en labores defensivas depende igualmente del equilibrio que alcance el equipo.
Es un disparate cargar ahora contra el lateral, la posición mejor cubierta de la plantilla, con un Dani Castellano y un Macedo descomunales y un Hélder y un David Simón esperando su oportunidad. Son ganas de agonías.