coloramarillo, tus afirmaciones están ancladas en un radicalismo casi enfermizo. Yo no sé cómo organizas tu vida, pero sería una muestra de respeto por tu parte que no aseveres nada sobre las vidas de otras personas que no tienen nada que ver contigo ni con tus creencias.coloramarillo escribió:adrigm, toda tu forma de pensar, de actuar, de organizar tu vida es cristiana, nuestra cultura es cristiana, nuestra nación se forjó en base a una forma de ver la vida cristiana. Ahora todo el mundo reniega de lo que es. Hasta la organización de tu familia es cristiana, no es la misma de los musulmanes, ni la de otras religiones, lo que somos se lo debemos a la concepción cristiana de la vida, pero ¡qué pena!, ahora todos piden relegar al cristianismo al mismo lugar que el islam o el budismo.
Es un autosuicidio, pero es muy moderno decir lo que tú y muchos dicen sin pararse a pensar. Y vuelvo a decirte que no podrías banalizar esta fiesta religiosa si fuera de otra religión porque simplemente no te lo permitirían. Tú mismo. Hoy a la gente no le gusta pensar, simplemente divertirse, aunque sea en la fiesta del vecino al que desprecia profundamente.
Si tu quieres respeto para tus creencias, ten un poco más para las de los demás, cualquiera que sean estas. Y si alguien banaliza los símbolos que mencionas, allá esa persona, no debería afectar eso a tu manera de sentir tu religión. Vive y deja vivir. Te quejas de que "todos" piden relegar al cristianismo al mismo lugar que al islam o al budismo... pero es que esto es una carrera de religiones?? El cristianismo es tan (no más) respetable como las otras religiones, y no darías buen ejemplo de la tuya si quieres preponderar tus crencias sobre las de otros. Y no me valen los ejemplos del fundamentalismo musulmán, eso está relacionado con la incultura y la interpretación violenta de esa creencia... al igual que se hizo con el cristianismo en el pasado... te suenan las cruzadas, la inquisición, las expediciones "evangelizadoras" españolas en América????
Lo dicho. Vive y deja vivir, si el vecino interpreta un símbolo de una manera que no te gusta (sin llegar a la mofa, claro), allá él.




