La Estratificación de la Prensa Social Amarilla
Publicado: Jue Oct 15, 2009 4:13 pm
En términos de sociología y a través de los estratos sociales, se suele hacer una distinción de las diferentes clases sociales que existen. De esta manera se lleva a formar la División de Clases Sociales que van desde los más favorecidos a los menos favorecidos.
Un término muy común en dicha división viene referido a la Movilidad Social donde un individuo puede saltar desde una clase de origen a otra.
Haciendo una reflexión y asemejando estos conceptos, refiriéndolos a la prensa social amarilla, (igualmente podría referirse a cualquier medio de comunicación de cualquier equipo de fútbol del mundo entero), podremos hacer la siguiente división de clases con respecto a la UD Las Palmas en tres aspectos fundamentales: la prensa subjetiva (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, dando una más que discutible opinión sobre el día a día del club), la prensa objetiva (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, pero trata de aportar veracidad en sus declaraciones) y la prensa moldeable (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, pero tiene una opinión muy voluble según salten de un determinado medio periodístico a otro).
Sin lugar a dudas, dentro del escalafón social amarillo, ocupan un lugar de privilegio puesto que son quienes informan a diario del devenir del equipo. Suelen tener a diversos cronistas que según la senda que escojan pueden ser más críticos ó menos críticos (no siempre esta condición implica mayor objetividad en los comentarios y esto va directamente relacionado con la realidad que describan).
Esta gente cobra porque están desempeñando su oficio social, y a menudo se suelen dejar llevar por sus propios sentimientos a la hora de evaluar el presente más inmediato, y es precisamente aquí donde se podría distinguir entre el buen informador y el mal informador.
Un mal informador (prensa subjetiva) es aquel que se deja llevar por sus instintos y no ve más allá de lo que le dicta su propia conciencia. Normalmente se dejan llevar por premisas establecidas desde los órganos directores más inmediatos que les planifican la estrategia a seguir.
Ejemplos claros de ello podemos encontrarlos en la prensa diaria de la isla, por poner algunos, destacar titulares del Canarias 7 cuando la UD anunció la contratación del nuevo director deportivo con un titular que venía a decir algo así: “La UD Las Palmas ficha al director dptvo. Que descendió al Recreativo de Huelva”, donde obviamente podrían haber señalado que fue el director dptvo. con quien ascendió el Recreativo a 1ª división y se mantuvo durante algunos años.
Otros titulares dentro de esta vertiente pueden ser los ataques indiscriminados sufridos por ex - miembros del plantel amarillo como Paco Castellano (en la cadena SER lo insultaron públicamente y no ha sido el único) al igual que el ataque sufrido por jugadores como Darino, Pindado y Márquez (según parece los únicos capitanes del equipo y los únicos con capacidad mental para decidir en el vestuario ya que al parecer los demás eran unos corderitos, de hecho ignoraban a David García, otro de los capitanes del equipo y el 2º en el escalafón, una vez más en la misma emisora de radio) como instigadores de la destitución de Juan Manuel Rodríguez (según parece el único santo en todo este asunto), a su vez que dejaban en buen lugar a jugadores como Santamaría, donde al final el tiempo ha terminado poniendo a cada uno en su sitio tras ver la actitud de este último. O más recientemente, en la propia emisora oficial de UD Las Palmas insinuando que la plaga de lesiones musculares de la actual temporada no se producían el año pasado porque por aquel entonces había otro preparador físico.
Un buen informador (prensa objetiva) es aquel que analiza el día a día y no lo hace desde un único punto de vista, sino que trata de ofrecer todas las visiones posibles que se puedan dar sobre un determinado asunto, tratando de evitar a toda costa anteponer sólo su opinión personal, sin escuchar otras opiniones y manteniendo una actitud de respeto sobre quienes habla.
Evidentemente, esto hoy en día es muy difícil de hallar, y raro será el medio ó el informador que pueda entrar dentro de esta dinámica. ¿Lo saben ustedes?.
Por citar un ejemplo claro y obvio, habría que remontarse fuera de los límites geográficos de la isla y trasladarnos a la geografía peninsular donde se hace un tipo de programa en el que el debate está servido y donde a buen seguro cada uno de los que participen en el mismo, entrarán y saldrán con la misma idea, pero donde no hay cabida para el insulto fácil sino para el debate público sin obviar la realidad. En la cadena televisiva VEO se suele ver un programa televisivo de esta índole, que sin llegar al término de perfección sí da lugar a un profundo e intenso debate. La perfección no existe, pero el buscarla es lo que diferencia a los más grandes de los más pequeños.
Evidentemente, ambos tipos de prensa causan un impacto social bastante amplio dentro del aficionado de a pie, que suele escuchar a diario estos programas y le hacen optar por diferentes modos de pensar que en muchos de los casos les influyen a la hora de decidirse por si adoptar una vertiente positiva o negativa de los hechos que se estén aconteciendo.
¿Cuántos no acuden al estadio con la idea predeterminada de pitar al equipo ó a determinados jugadores tras escuchar las opiniones de estos informadores?
¿Cuántos no acuden al estadio sin verse influenciados por las opiniones de estos informadores?
En cuanto a la prensa moldeable, su propio nombre lo indica todo y son aquellos informadores deportivos que cambian de chaqueta según el color del medio para el que trabajan, al igual que en política, un diputado de izquierdas se pasa a la derecha, o viceversa, según le paguen y demostrando su poca credibilidad en la función que desempeñan. En términos de la prensa deportiva amarilla, creo que no hace falta señalar quiénes son.
Como vemos, hay opiniones y decisiones para todos los gustos. Ahora bien ¿cuál está bien y cuál está mal?
Como suele decirse, el tiempo da y quita razones a todo el mundo.
Ya ven, como ocurre con los propios sociólogos del mundo, que no se ponen de acuerdo ni entre ellos mismos, pasaría un tanto de lo mismo con los buenos informadores deportivos. No se pondrán de acuerdo, pero pueden establecer el debate “bienintencionado”, y esta palabra hay que resaltarla, porque justo cuando se hace lo contrario, un debate “malintencionado” es cuando no hay razón obvia lógica alguna. Y esto último ocurre muy a menudo en esta isla. Y no sólo es un hecho actual, sino que viene ya de bastante atrás.
Soy Amarillo
Saludos Positivos!
Un término muy común en dicha división viene referido a la Movilidad Social donde un individuo puede saltar desde una clase de origen a otra.
Haciendo una reflexión y asemejando estos conceptos, refiriéndolos a la prensa social amarilla, (igualmente podría referirse a cualquier medio de comunicación de cualquier equipo de fútbol del mundo entero), podremos hacer la siguiente división de clases con respecto a la UD Las Palmas en tres aspectos fundamentales: la prensa subjetiva (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, dando una más que discutible opinión sobre el día a día del club), la prensa objetiva (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, pero trata de aportar veracidad en sus declaraciones) y la prensa moldeable (la que recibe sustento económico a costa del equipo de fútbol, pero tiene una opinión muy voluble según salten de un determinado medio periodístico a otro).
Sin lugar a dudas, dentro del escalafón social amarillo, ocupan un lugar de privilegio puesto que son quienes informan a diario del devenir del equipo. Suelen tener a diversos cronistas que según la senda que escojan pueden ser más críticos ó menos críticos (no siempre esta condición implica mayor objetividad en los comentarios y esto va directamente relacionado con la realidad que describan).
Esta gente cobra porque están desempeñando su oficio social, y a menudo se suelen dejar llevar por sus propios sentimientos a la hora de evaluar el presente más inmediato, y es precisamente aquí donde se podría distinguir entre el buen informador y el mal informador.
Un mal informador (prensa subjetiva) es aquel que se deja llevar por sus instintos y no ve más allá de lo que le dicta su propia conciencia. Normalmente se dejan llevar por premisas establecidas desde los órganos directores más inmediatos que les planifican la estrategia a seguir.
Ejemplos claros de ello podemos encontrarlos en la prensa diaria de la isla, por poner algunos, destacar titulares del Canarias 7 cuando la UD anunció la contratación del nuevo director deportivo con un titular que venía a decir algo así: “La UD Las Palmas ficha al director dptvo. Que descendió al Recreativo de Huelva”, donde obviamente podrían haber señalado que fue el director dptvo. con quien ascendió el Recreativo a 1ª división y se mantuvo durante algunos años.
Otros titulares dentro de esta vertiente pueden ser los ataques indiscriminados sufridos por ex - miembros del plantel amarillo como Paco Castellano (en la cadena SER lo insultaron públicamente y no ha sido el único) al igual que el ataque sufrido por jugadores como Darino, Pindado y Márquez (según parece los únicos capitanes del equipo y los únicos con capacidad mental para decidir en el vestuario ya que al parecer los demás eran unos corderitos, de hecho ignoraban a David García, otro de los capitanes del equipo y el 2º en el escalafón, una vez más en la misma emisora de radio) como instigadores de la destitución de Juan Manuel Rodríguez (según parece el único santo en todo este asunto), a su vez que dejaban en buen lugar a jugadores como Santamaría, donde al final el tiempo ha terminado poniendo a cada uno en su sitio tras ver la actitud de este último. O más recientemente, en la propia emisora oficial de UD Las Palmas insinuando que la plaga de lesiones musculares de la actual temporada no se producían el año pasado porque por aquel entonces había otro preparador físico.
Un buen informador (prensa objetiva) es aquel que analiza el día a día y no lo hace desde un único punto de vista, sino que trata de ofrecer todas las visiones posibles que se puedan dar sobre un determinado asunto, tratando de evitar a toda costa anteponer sólo su opinión personal, sin escuchar otras opiniones y manteniendo una actitud de respeto sobre quienes habla.
Evidentemente, esto hoy en día es muy difícil de hallar, y raro será el medio ó el informador que pueda entrar dentro de esta dinámica. ¿Lo saben ustedes?.
Por citar un ejemplo claro y obvio, habría que remontarse fuera de los límites geográficos de la isla y trasladarnos a la geografía peninsular donde se hace un tipo de programa en el que el debate está servido y donde a buen seguro cada uno de los que participen en el mismo, entrarán y saldrán con la misma idea, pero donde no hay cabida para el insulto fácil sino para el debate público sin obviar la realidad. En la cadena televisiva VEO se suele ver un programa televisivo de esta índole, que sin llegar al término de perfección sí da lugar a un profundo e intenso debate. La perfección no existe, pero el buscarla es lo que diferencia a los más grandes de los más pequeños.
Evidentemente, ambos tipos de prensa causan un impacto social bastante amplio dentro del aficionado de a pie, que suele escuchar a diario estos programas y le hacen optar por diferentes modos de pensar que en muchos de los casos les influyen a la hora de decidirse por si adoptar una vertiente positiva o negativa de los hechos que se estén aconteciendo.
¿Cuántos no acuden al estadio con la idea predeterminada de pitar al equipo ó a determinados jugadores tras escuchar las opiniones de estos informadores?
¿Cuántos no acuden al estadio sin verse influenciados por las opiniones de estos informadores?
En cuanto a la prensa moldeable, su propio nombre lo indica todo y son aquellos informadores deportivos que cambian de chaqueta según el color del medio para el que trabajan, al igual que en política, un diputado de izquierdas se pasa a la derecha, o viceversa, según le paguen y demostrando su poca credibilidad en la función que desempeñan. En términos de la prensa deportiva amarilla, creo que no hace falta señalar quiénes son.
Como vemos, hay opiniones y decisiones para todos los gustos. Ahora bien ¿cuál está bien y cuál está mal?
Como suele decirse, el tiempo da y quita razones a todo el mundo.
Ya ven, como ocurre con los propios sociólogos del mundo, que no se ponen de acuerdo ni entre ellos mismos, pasaría un tanto de lo mismo con los buenos informadores deportivos. No se pondrán de acuerdo, pero pueden establecer el debate “bienintencionado”, y esta palabra hay que resaltarla, porque justo cuando se hace lo contrario, un debate “malintencionado” es cuando no hay razón obvia lógica alguna. Y esto último ocurre muy a menudo en esta isla. Y no sólo es un hecho actual, sino que viene ya de bastante atrás.
Soy Amarillo
Saludos Positivos!