Nicolás Ortega, un amarillo incondicional
Publicado: Vie Oct 29, 2010 8:23 pm
Aprovechando el artículo que publica el Canarias 7 sobre Nicolás Ortega, quiero sumarme y rendir mi modesto homenaje a un caballero de los pies a la cabeza que lo ha dado todo por la UD Las Palmas y que ha demostrado sobradamente su amor incondicional por estos colores.
Llegó en los peores momentos del club. Cuando la entidad agonizaba y no tenía ni para pagar la luz, se subió al carro y pagó de su bolsillo los viajes a la península que posibilitaron que el club quedara descalificado por incomparencia.
Compartió despacho con García Navarro y de ahí en adelante ha sido fiel testigo de todo el proceso concursal y del lento resurgir de la entidad hasta estos momentos. Como fiel defensor de la cantera desde siempre ahora ve recompensado su empeño en el fruto que empiezan a dar las nuevas hornadas de canteranos que despuntan.
Son muchas las anécdotas y sinsabores que podría contar de Nicolás. En los peores momentos del club tuve la oportunidad de compartir algunas confidencias muy duras y dificiles que iban siempre acompañadas de lágrimas e impotencia por el dolor de ver morir al club.
Al final la entidad ha salido adelante y en gran parte ha sido gracias al bueno e irrepetible de Nicolás Ortega.
Gracias por todo.
http://www.canarias7.es/articulo.cfm?id=188076
Llegó en los peores momentos del club. Cuando la entidad agonizaba y no tenía ni para pagar la luz, se subió al carro y pagó de su bolsillo los viajes a la península que posibilitaron que el club quedara descalificado por incomparencia.
Compartió despacho con García Navarro y de ahí en adelante ha sido fiel testigo de todo el proceso concursal y del lento resurgir de la entidad hasta estos momentos. Como fiel defensor de la cantera desde siempre ahora ve recompensado su empeño en el fruto que empiezan a dar las nuevas hornadas de canteranos que despuntan.
Son muchas las anécdotas y sinsabores que podría contar de Nicolás. En los peores momentos del club tuve la oportunidad de compartir algunas confidencias muy duras y dificiles que iban siempre acompañadas de lágrimas e impotencia por el dolor de ver morir al club.
Al final la entidad ha salido adelante y en gran parte ha sido gracias al bueno e irrepetible de Nicolás Ortega.
Gracias por todo.
http://www.canarias7.es/articulo.cfm?id=188076
Testigo y actor de una transición de penurias
Nicolás Ortega cumple ocho años de su primer contacto con la Unión Deportiva
Nicolás Ortega es hoy el vicepresidente de un club estable en sus obligaciones económicas, modelo consagrado también en lo deportivo. Pero hace ocho años entró con «el alma rota» por los despachos de Pío XII para, siendo aficionado, pagar el viaje del equipo a Almería cuando no había un duro en caja.
Se cumplen ocho años de su primer contacto con la entidad. Eran los días más tenebrosos en la historia del representativo, club al que profesaba devoción pero del que nunca pensó ser dirigente. Ortega, emotivo en el recuerdo, rememora como aterrizó en la sede del club. «Estaba en mi casa viendo un informativo nacional cuando contaron que Las Palmas no tenía para viajar a Almería. Yo no pude quedarme quieto ante esa situación y me ofrecí a pagar el desplazamiento (9.000 euros). Quería que fuera algo íntimo, discreto. Pero el club quiso hacerlo público. Vino bien, otros empresarios aparecieron tras ese gesto para colaborar también», significa satisfecho.
La cronología es conocida por todos a raíz de ese hecho crucial. Ortega entró en la plancha de Ricardo Ríos como consejero, y todos los consejos que han venido después, desde Manuel García Navarro a Miguel Ángel Ramírez, pasando por los interventores judiciales han querido contar con él en su equipo gestor. «Cuando me lo ofrecieron no quise al principio. Pero tengo desde pequeño, cuando mi padre me colaba en el Estadio Insular, y él se iba a verlo a la arena porque no teníamos dinero, un enamoramiento muy fuerte. Tuve reuniones con Boro Cuyás y con Aníbal y Murli, y todos me desaconsejaban entrar en el club. Pero no podía dejar de colaborar con los que querían que el club no desapareciera. Incluso muchos consejeros me dijeron que estaba loco, y que la entidad iba a la ruina. Hoy me dicen que tenía razón, que salvar a Las Palmas fue posible», cuenta.
Hasta la aparición de la administración concursal, Ortega vivió días infernales en Pío XII. «Fueron momentos muy complicados, con incidentes con la FIFA cuando quería quitarnos puntos, impagos...Podrían contarse infinidad de anécdotas que no dejarían a muchos bien parados, pero ahora, con el club saneado, es el momento de ser constructivos».
Aunque ahora la coyuntura le ofrece una pose serena, el vicepresidente de la Unión Deportiva recorrió un camino peliagudo antes de llegar a este punto. «Tenía que estar todos los días en el club, lidiando con mil asuntos a diario. No había ninguna estructura en la que apoyarnos. Recuerdo lo mal que lo pasamos en junio de 2004, donde necesitábamos 440 millones de pesetas para pagar a los jugadores o desaparecíamos. Al final, lo logramos a última hora con mucho sufrimiento», significa.