Responde tú que a mi me da risa...
Publicado: Lun Sep 19, 2005 8:11 pm
Estoy de acuerdo en que hay más de un post abierto en este sentido y más de una opinión al respecto. Desconozco la opinión de la mayoría de nosotros. Copio aquí una crítica de un forero de magazinelp.com a la Editorial de canariasahora.com defendiendo nuestro Estadio Insular.
Post extraido de http://www.magazinelp.com/foro/viewtopi ... 3&start=15
"Playa Chica dice:
Aquí les copio la editorial de hoy del periódico CanariasAhora.com:
El test del Estadio Insular
EDITORIAL
La forma de actuar del Cabildo de Gran Canaria en el futuro del Estadio Insular presagia que su presidente, José Manuel Soria, ha decidido su demolición al modo que lo hizo con el edificio Woerman, que sigue arrojando escándalos. La isla de Gran Canaria está paralizada porque la forma de conducirse, y en ocasiones de ser, del señor Soria impide el debate de ideas y sólo permite el choque de trenes.Y ese choque sólo se puede dilucidar cada cuatro años en la ocasión electoral. Al impedir el debate, el presidente del Cabildo, que lo es del PP canario, sólo ha conseguido que cualquier iniciativa suya sea rechazada ad homine, sea buena o mala esa iniciativa.
Descontado por imposible el señor Soria, las miradas se vuelven hacia la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Josefa Luzardo. Parece que le ha sentado mal la alegación en contra de la demolición realizada por el Colegio de Arquitectos, al punto de emitir la boutade de "que se presente el señor Mena [presidente de los arquitectos] a las elecciones". Al parecer, la alcaldesa no acepta la discrepancia o la alegación y entiende que la única manera de participar en la cosa pública pasa por presentarse a la elecciones municipales, lo que sería una forma disparatada de entender la democracia representativa.
La alcaldesa debería reflexionar y pensar que muchos que critican sus acciones le respetan en lo personal y que todavía tiene crédito para dialogar, consensuar y decidir, que para eso sin duda es para lo que le habilita su victoria electoral. La alcaldesa tiene legitimidad para decidir, pero no la tiene para cercenar un debate necesario.
Construir mal o destruir mal no son equivalentes. Destruir comporta un plus adicional de responsabilidad. En la decisión de construir no está necesariamente el debe de ser leal con los que nos precedieron. La ciudad no es un conjunto de edificaciones sino de recuerdos, de vivencias compartidas, de mensajes emitidos pero nunca olvidados, como nos recuerda Italo Calvino en sus Ciudades invisibles.
Para ese debate, o mejor dicho, para ese encuentro de sentimientos o de sensibilidades, la alcaldesa, lo mismo que la oposición municial, puede huir de diatribas contaminadas por lo personal y buscar un diálogo cohesionador para esta ciudad a la que, sin duda, la alcaldesa quiere como quien mejor quiere a la ciudad que preside.
El Estadio Insular va a ser el test que ratifique si gobierna la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria una alcaldesa con grandeza o si la primera mujer que presidió el Consistorio fue sorda ante parte de la ciudadanía que le exigió ser consultada. Una vez consumado ese ejercicio democrático, que decida quién tiene esa responsabilidad
La verdad es que me parece que este periódico asume la representación de la ciudadanía respecto al Insular, de forma bastante partidista y sin muchos más argumentos que sencillamente creerse llamado a ello sin que nadie le haya atribuido esa capacidad. Frases como "fue sorda ante parte de la ciudadanía", pero ¿y la otra parte de la ciudadanía? ¿fue sorda a esa parte también? ¿o es que toda la ciudadanía está de acuerdo con la línea de la editorial? ¿tiene algo que decir esa otra parte de la ciudadanía o su opinión no está incluida dentro de aquella a la que hace referencia el artículo?
Continúa el editorial con afirmaciones como "La ciudad no es un conjunto de edificaciones sino de recuerdos, de vivencias compartidas, de mensajes emitidos pero nunca olvidados"
La verdad es que no puedo estar más en desacuerdo. La ciudad para mi es eso, un conjunto de construcciones que tienen que estar al servicio de los ciudadanos. Y bueno ya lo de las "vivencias compartidas y mensajes emitidos pero nunca olvidados" es de lo más cursi que he leido desde hace mucho tiempo. ¿Y por qué tiramos el tunel de la Laja? ¡Pues porque ya no servía para lo que había sido concebido! Ya hemos construido el sustituto del Insular. Nos gustará más o menos, se sentirá más o menos el calor de los aficionados, pero ya nos hemos gastado la pasta en construir uno nuevo. Tiremos abajo el viejo Estadio y construyamos en su lugar un espacio útil y beneficioso para la generalidad de la población.
Por último los arquitectos: pueden quejarse como quieran, como cualquiera de los ciudadanos: unos queremos tirar el Insular y otros prefieren conservarlo, no creo que sea muy difícil decantarse por una u otra opción, pero no entiendo a qué utilizar al Colegio de Arquitectos, como institución, en ello.
Saludos"
Post extraido de http://www.magazinelp.com/foro/viewtopi ... 3&start=15
"Playa Chica dice:
Aquí les copio la editorial de hoy del periódico CanariasAhora.com:
El test del Estadio Insular
EDITORIAL
La forma de actuar del Cabildo de Gran Canaria en el futuro del Estadio Insular presagia que su presidente, José Manuel Soria, ha decidido su demolición al modo que lo hizo con el edificio Woerman, que sigue arrojando escándalos. La isla de Gran Canaria está paralizada porque la forma de conducirse, y en ocasiones de ser, del señor Soria impide el debate de ideas y sólo permite el choque de trenes.Y ese choque sólo se puede dilucidar cada cuatro años en la ocasión electoral. Al impedir el debate, el presidente del Cabildo, que lo es del PP canario, sólo ha conseguido que cualquier iniciativa suya sea rechazada ad homine, sea buena o mala esa iniciativa.
Descontado por imposible el señor Soria, las miradas se vuelven hacia la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Josefa Luzardo. Parece que le ha sentado mal la alegación en contra de la demolición realizada por el Colegio de Arquitectos, al punto de emitir la boutade de "que se presente el señor Mena [presidente de los arquitectos] a las elecciones". Al parecer, la alcaldesa no acepta la discrepancia o la alegación y entiende que la única manera de participar en la cosa pública pasa por presentarse a la elecciones municipales, lo que sería una forma disparatada de entender la democracia representativa.
La alcaldesa debería reflexionar y pensar que muchos que critican sus acciones le respetan en lo personal y que todavía tiene crédito para dialogar, consensuar y decidir, que para eso sin duda es para lo que le habilita su victoria electoral. La alcaldesa tiene legitimidad para decidir, pero no la tiene para cercenar un debate necesario.
Construir mal o destruir mal no son equivalentes. Destruir comporta un plus adicional de responsabilidad. En la decisión de construir no está necesariamente el debe de ser leal con los que nos precedieron. La ciudad no es un conjunto de edificaciones sino de recuerdos, de vivencias compartidas, de mensajes emitidos pero nunca olvidados, como nos recuerda Italo Calvino en sus Ciudades invisibles.
Para ese debate, o mejor dicho, para ese encuentro de sentimientos o de sensibilidades, la alcaldesa, lo mismo que la oposición municial, puede huir de diatribas contaminadas por lo personal y buscar un diálogo cohesionador para esta ciudad a la que, sin duda, la alcaldesa quiere como quien mejor quiere a la ciudad que preside.
El Estadio Insular va a ser el test que ratifique si gobierna la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria una alcaldesa con grandeza o si la primera mujer que presidió el Consistorio fue sorda ante parte de la ciudadanía que le exigió ser consultada. Una vez consumado ese ejercicio democrático, que decida quién tiene esa responsabilidad
La verdad es que me parece que este periódico asume la representación de la ciudadanía respecto al Insular, de forma bastante partidista y sin muchos más argumentos que sencillamente creerse llamado a ello sin que nadie le haya atribuido esa capacidad. Frases como "fue sorda ante parte de la ciudadanía", pero ¿y la otra parte de la ciudadanía? ¿fue sorda a esa parte también? ¿o es que toda la ciudadanía está de acuerdo con la línea de la editorial? ¿tiene algo que decir esa otra parte de la ciudadanía o su opinión no está incluida dentro de aquella a la que hace referencia el artículo?
Continúa el editorial con afirmaciones como "La ciudad no es un conjunto de edificaciones sino de recuerdos, de vivencias compartidas, de mensajes emitidos pero nunca olvidados"
La verdad es que no puedo estar más en desacuerdo. La ciudad para mi es eso, un conjunto de construcciones que tienen que estar al servicio de los ciudadanos. Y bueno ya lo de las "vivencias compartidas y mensajes emitidos pero nunca olvidados" es de lo más cursi que he leido desde hace mucho tiempo. ¿Y por qué tiramos el tunel de la Laja? ¡Pues porque ya no servía para lo que había sido concebido! Ya hemos construido el sustituto del Insular. Nos gustará más o menos, se sentirá más o menos el calor de los aficionados, pero ya nos hemos gastado la pasta en construir uno nuevo. Tiremos abajo el viejo Estadio y construyamos en su lugar un espacio útil y beneficioso para la generalidad de la población.
Por último los arquitectos: pueden quejarse como quieran, como cualquiera de los ciudadanos: unos queremos tirar el Insular y otros prefieren conservarlo, no creo que sea muy difícil decantarse por una u otra opción, pero no entiendo a qué utilizar al Colegio de Arquitectos, como institución, en ello.
Saludos"