Difícil visita tenía el filial amarillo en la noche de ayer en el Estadio Insular. Con unos 500 aficionados,muchos de ellos llegados para apoyar al equipo visitante, dos de los mejores equipos de la categoría se enfrentaron en un partido aburrido sin casi ocasiones de gol claras, marcado por la nefasta actuación del árbitro que destrozó a tarjetas al filial de la UD Las Palmas.
El debut en casa como entrenador de Momo no fue todo lo feliz que se esperaba, aunque visto lo visto, el empate es positivo, ya que el Castillo llegaba al Insular como líder de la categoría e invicto junto a La Oliva y el Villa de Sta Brígida, y el equipo amarillo jugó toda la seguda parte sin su alma mater, el conejero Jotha, expulsado rigurosamente por el colegiado por doble amarilla en su segunda falta al borde del descanso.
No fue un prodigio de fútbol el choque, sobre todo por el respeto que ambos conjuntos demostraron a lo largo del mismo, un Castillo plagado de veteranos del fútbol canario como Francis Hernández o Santiago Abad y un filial lleno de jugadores jóvenes que conforman el mejor equipo de los últimos años cuyo objetivo no es otro que el ascenso a 2ª B.
Muy agresivo el juego de Las Palmas B, que a pesar de su juventud no se dejó achicar por el equipo sureño, circunstancia que el colegiado no dejó pasar por alto e intentó cortar con numerosas tarjetas, aunque los jugadores del Castillo le ponían bastante teatro y protestaban cualquier roce con los jugadores amarillos.
En la primera mitad casi no hubo acercamientos a ambas porterías, mucho juego en el centro del campo donde destacaron Jotha y Francis Hernández los 6 de ambos conjuntos. Destacar el pundonor y las ganas del 8 amarillo, Pollo, que puso firmes a los defensas sureños con su descaro y verticalidad. El hecho más importante fue la expulsión de Jotha que desarmó al equipo capitalino para la segunda mitad. En resumen que ni Ariel ni Javi Ortega tuvieron mucho trabajo.
La segunda parte fue un monólogo del Castillo, el filial amarillo no tenía centro del campo y el ekipo sureño fue el dominador del choque aunque sin llegar con claridad a la meta de Ariel sino con disparos lejanos, la defensa trabajó bien, a pesar del mal día de Mairata. Las Palmas B casi no tocaba bola sólo llegaba a balón parado y Memo era una isla en medio del mar de jugadores del Castillo. Momo dio entrada a Pablo a 20 minutos del final, lo que manifestaba su renuncia al partido ya que pasó a jugar con tres centrales y dos carrileros con el palmero Memo solo arriba.
Paradójicamente la ocasión mas clara del partido fue a pocos minutos del final, cuando a la salida de un corner y tras un rechace, Memo, ¡ay Memo! mandó el balón al palo en un mal remate lo que hubiera significado la victoria y el flipe de los pibes.
Finalmente empate a cero, justo por los méritos de ambos equipos que demuestran su condición de favoritos de cara a la liguilla de ascenso a 2ª B, ambos equipos continuan invictos Las Palmas B con 5 puntos y el Castillo con 10, pero con un partido más.
Ahora toca visitar a La Oliva, equipo difícil en su casa, donde hay que puntuar para seguir en la brecha.
OSWALDO.