AncarUD escribió:canarion_92 escribió:Es obvio que le ofrecen trabajo a los padres a cambio de que su hijo juegue en su equipo, y el padre acepta que su hijo juegue en otro equipo y en otra comunidad autónoma para conseguir un trabajo
No lo critico, entiendo que hay necesidades económicas, pero joder. Eso es mercadeo aquí y en Pekín
Estás aprovechándote de tu hijo para conseguir un trabajo a costa de alejarle de su familia, amigos, etc
Allá cada padre con las decisiones que tome, pero que es mercadeo de chavales es evidente, no seamos ilusos
Ponte en el lugar de ese Padre/Madre sin trabajo.
Te ofrecen un curro para poder darle un futuro a tu familia y
para eso tu hijo tiene que salir de Gran Canaria para irse a Galicia por ejemplo, a Jugar al fútbol donde encima le van a dar una buena educación. Luego viene un tío que no te conoce de nada a ti ni de tu situación y te dices que estas mercadeando con tu hijo. ¿Cómo te quedas?
A ti no te van a dar el trabajo por tener un hijo y dificultades, te lo dan porque tienes un hijo que juega al fútbol. Es lo mejor para tu familia y es una oportunidad. Yo lo considero mercadeo, porque no es justo para un niño tener que decidir nada sobre su futuro a esa edad, y él no puede marcharse sólo con su voluntad.
Imaginemos que sea su sueño jugar en un grande como el Barça y se lo lleven, le va bonito y todos contentos (menos los aficionados que teníamos esperanzas en él de amarillo). ¿Y si le va mal? ¿Será su culpa haberse marchado? ¿No se adaptó o tal vez tomó la decisión equivocada?
Un niño no puede decidir esas cosas, y sus padres tampoco. Por ello la FIFA ha sancionado a Barcelona, Atlético de Madrid, Real Madrid... y sancionará a muchos más por este tipo de prácticas. Porque se trata de un
evidente mercadero, de trata, como lo quieras llamar, porque sólo es (el niño) un esclavo de los intereses de los clubes y más tristemente a veces de unos padres que quieren convertirse en los nuevos ricos.
PD: Algunos de esos padres que
explotan literalmente a sus hijos deberían incluso perder la custodia de éstos. Están deseando que su máquina de jugar al fútbol reciba una gran oferta para enviarlo con un lacito a su destino, y "eh, no te olvides de que somos tus padres y estás ahí por nosotros, así que paga".
Y no, no es algo nuevo ni una historia inventada. Hay mucho maltratador por ahí suelto.