El presidente amarillo mantuvo un cara a cara con los jugadores antes del crucial choque de este domingo ante el Tenerife tras caer en Galicia con el objetivo de cambiar la mala dinámica que arrastran desde hace semanas.
Una conjura antes del derbi. Terapia de grupo para paliar la crisis amarilla. Miguel Ángel Ramírez ha querido dar un paso al frente como presidente de la UD Las Palmas y, a menos de una semana de ese duelo ante el CD Tenerife, se reunió con los jugadores una vez aterrizaron procedentes de tierras lucenses para transmitirles sus pensamientos acerca de la situación deportiva que vive el equipo ahora mismo tal como él mismo desveló el programa ‘Mírame Sport’ de Mírame TV.
Con la franqueza que le caracteriza, el máximo mandatario le explicó a sus hombres cómo ve la mala racha que están atravesando con sus correspondientes réplicas, ya que hubo algunos futbolistas que tomaron la palabra para también proyectar sus sensaciones ahora que las derrotas están haciendo mella. El objetivo del accionista mayoritario amarillo con esta charla es buscar esa vuelta de tuerca que lleve al equipo insular a escapar de las tinieblas y empezar de una vez a remontar el vuelo.
Lo cierto es que la importancia del choque ante el Tenerife toma especial relevancia por el bache que atraviesa la UD. Antes de Navidad hay que ganar los dos partidos que quedan para tomar con un poco más de calma ese pequeño respiro que da el calendario. El presidente lo sabe y por eso quiso tomar la palabra ante la plantilla para intentar acabar con ese «bloqueo mental» que dice el propio Ramírez que sufren sus jugadores. Ahora les toca a ellos dar ese paso al frente.
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Este artículo se modificó el 13/12/2018 09:22 09:22