A la UD Las Palmas no le queda otra que cambiar el chip como visitante durante la segunda vuelta si no quiere seguir ver alejándose de esos puestos de Playoff por los que deberían luchar los amarillos. Málaga, Coruña, Alcorcón y Granada, entre otros, son algunos de los destinos.
El síndrome del avión debe acabar para la UD. Los malos resultados de los amarillos lejos del calor del Estadio de Gran Canaria son una lacra que deben paliar cuanto antes. El nivel competitivo mostrado por los insulares en sus visitas en las últimas temporadas denotan una maldición clara cada vez que se montan para poner rumbo a cualquier estadio de la geografía de LaLiga sin importar el momento en que llega su rival, algo que se ha traducido en derrotas ante equipos con problemas.
No obstante, esto tiene que acabar. Las Palmas necesita una reacción y para poder tener opciones de romper con la crisis va a necesitar de victorias fuera de Siete Palmas. Ya no puede haber excusas, pero también hay que remarcar que durante la segunda vuelta de esta Segunda División el cuadro que ahora mismo dirige Paco Herrera tiene que acudir a lugares muy complicados donde, básicamente, se van a jugar muchos puntos aquellos clubes que pelean por el ascenso a final de curso.
Los amarillos tienen que visitar Málaga, Granada, Albacete, Alcorcón o Coruña, ciudades de equipos que están en la parte alta de la tabla. Sin embargo, también tiene que pasar por Pamplona, Soria, Tenerife u Oviedo, que tampoco son peras en dulce. De resto, quedaría visitar Reus y Tarragona, por lo que de esos 11 partidos va a ser vital para las aspiraciones amarillas ganar unos cuantos.
Si atendemos a la última visita a cada uno de esos Estadios, la UD suma un total de 10 puntos de 30 posibles, teniendo en cuenta que los insulares no han visitado nunca en su historia el campo del Reus Deportiu. Quizás estos números sean insuficientes porque obligarían a ganar todo en casa para tener alguna oportunidad de estar en los Playoff, un aspecto que demuestra la importancia de ganar fuera.
Sobre todo, ganar como visitante en la situación en la que está Las Palmas. Porque con un poco más de holgura todo se vería de forma distinta. Sin embargo, no hay margen de error para estar arriba y no queda otra que apretar los dientes para dejar atrás el síndrome del avión.
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Este artículo se modificó el 28/12/2018 18:08 18:08