Manu Sayabera prepara un entrenamiento de la UD Las Palmas en Barranco Seco. | andrés cruz
José Mendoza | | 27.02.2014 | 02:10
Ya se aproxima marzo y, en el horizonte, el tramo final de la maratón que es Segunda. Los equipos de la categoría encaran la jornada 28, tiempo en el que las piernas de muchos jugadores empiezan a acusar el cansancio después de más de media temporada disputada. Para que eso no ocurra, cada conjunto tiene su particular receta elaborada por sus preparadores físicos. La UD Las Palmas, en el kilómetro cero, dibuja un boceto de la maratón que cada semana se ve ligeramente modificado en función de la exigencia de cada partido. Y, a medida que se aproxima la meta, disminuye la carga de trabajo para que los jugadores lleguen en el mejor estado de forma posible al fin de semana. Es el plan de Manu Sayabera, preparador físico y mano derecha de Sergio Lobera.
"A medida que vayan pasando las semanas y los meses va bajando el volumen de trabajo. Actualmente estamos teniendo sesiones de entre noventa y cien minutos, y en el mes de mayo posiblemente no superen los setenta minutos. Así, quitando volumen y manteniendo la intensidad de trabajo, intentaremos que el jugador llegue de la mejor forma posible a los partidos", explica Sayabera.
El responsable de la preparación física de los jugadores asegura que al principio de temporada siempre se hace una planificación general que se modifica semana a semana: "La realidad es que no podemos ir más allá de una semana. Tienes que cambiar cosas, trabajar en base al trabajo táctico de lo que se quiera plantear en el partido del fin de semana, y siempre hay conceptos que te van a obligar a trabajar de una manera o de otra. Hay unas líneas generales para llegar al final de temporada de la mejor forma posible, pero sin olvidarnos del partido de cada semana", añade.
Una plantilla de 25, más los miembros del filial que se incorporan en cada sesión, es muy exigente, y cada pieza tiene sus particularidades. Por eso, hay jugadores a los que se le da un trato diferente en función del momento que atraviesen: "Hacer que todos los jugadores entrenen con la misma intensidad no es lo más idóneo. Pueden ser jugadores que llevan un volumen muy alto de partidos, jugadores que han salido de alguna lesión, jugadores que han sufrido molestias durante la semana anterior... vamos regulando eso para que el jugador llegue en las mejores condiciones posibles al fin de semana", continúa.
Sin embargo, Sayabera no cree que calcular los picos de forma no es lo más apropiado en el fútbol: "Eso picos que en muchos deportes se planifican, en el fútbol no son reales. Puedes tener a tu equipo preparado para una semana, y juegas muy bien o corres mucho pero pierdes. Los picos de forma no van unidos al resultado. No hacemos planificaciones en base a eso".
El factor psicológico
Después de varias semanas en estado de depresión, el vestuario, el cuerpo técnico y toda la UD Las Palmas en general, se ha quitado con la remontada ante el Girona un peso de encima que permite, admite Sayabera, trabajar en mejores condiciones. Asegura el preparador que un resultado positivo influye no solo en la mentalidad y en la confianza de los jugadores, sino también en su físico: "Cuando un equipo gana, el estado emocional en el que se encuentra es un estado de felicidad porque realmente has conseguido un objetivo. Cuando consigues logros tu cuerpo está feliz, tu cuerpo está bien, tus piernas van mucho mejor, la cabeza también, y ahí es donde estamos ahora, hay que aprovecharlo. Llevábamos semanas en las que no se podía trabajar con esa alegría. Estas dos primeras sesiones de la semana han sido de mucha calidad, esperamos seguir así varias semanas más", desea el técnico pensando en el duelo ante el Lugo.
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