Jorge Peris · Las Palmas
La U.D. está muy molesta con las presuntas declaraciones de Lindbaek en un periódico de su país y está confirmando si son verdaderas o falsas, aspecto éste que ha corroborado su representante. El club investiga la veracidad o no de esas palabras y, si descubre que son ciertas, está dispuesto a despedirle.
El club está dispuesto a despedir al jugador noruego Andre Lindbaek si se demuestra que sus polémicas declaraciones al periódico de su país se corresponden con la verdad, aunque el delantero nórdico se encargó de desmentir, a través de su representante, Jonás Vallina, la veracidad de publicado.
El agente del jugador aseguró ayer que “sería del género tonto si dijera eso. Lindbaek niega rotundamente que insinuara que el equipo está descendido, ya que dijo todo lo contrario. Aseguró que va a pelear a muerte por ganar los cuatro partidos que quedan y tampoco dijo nada de la situación caótica y mucho menos que se quiera ir a otro equipo. Él quiere quedarse aquí y cumplir su contrato en Las Palmas, aunque sea en Segunda división B, porque él sí podría jugar en esa categoría”.
Vallina aludió al expediente abierto por el club a su representado: “Ha sido inoportuno e injusto porque el jugador no es impuntual y siempre llega con media de hora de antelación a los entrenamientos, mientras que hay jugadores que lo hacen cinco minutos antes. Es extraño lo que ha hecho el club y no sé si habrá algo en contra de Lindbaek”.
Con todo, el Consejo de Administración del club amarillo se ha mostrado dispuesto a tomar medidas drásticas contra el jugador nórdico, hasta el punto barajar la opción de despedirlo mientras investigan la exactitud de sus manifestaciones.
El técnico amarillo, Tino Luis, admitió a Marca que “el jugador se disculpó y el club está mirando si dice la verdad. Yo hable con él y le dije que si es cierto lo que se publica, no puede estar más en la plantilla, pero hay que darle el beneficio de la duda y creer en su palabra”.
Por lo pronto, lo más probable es que el ariete noruego se caiga de la convocatoria del sábado y no dispute el partido del Xerez, a la espera de que los directivos amarillos tomen una decisión definitiva sobre el espinoso asunto.
MARCA.COM
