Increíble, cuando entré al post lo último que me esperaba era esto

Y lo peor de todo es que se me viene a la mente los recuerdos de su entrevista en UDRadio de cómo se le llenaba la boca hablando de niños y la ilusión que tenía por tener uno... y que ahora le pase esto.
No sé qué decir, pero por si pueda servirle remotamente: mi más sincero pésame. No sólamente el mío, sino el de todos y cada uno de los
hijos de la familia amarilla y de su nobleza, honradez y sacrificio.
Ánimo Marcos
