La UD Taburiente no esperó más y en la primera oportunidad que tuvo para conseguir volver a la máxima categoría supo aprovecharla al golear por 4-1 al conjunto terranense del Egara 1935.
En el encuentro comenzó con muchos nervios por parte de los isleños, intentando ambos equipos dominar la posesión de la bola, aunque los de Jesús Martin mantuvieron su seriedad defensiva liderados por Gonzalo Altuna, que no dejaba que Pol García tuviera que intervenir a los ataques voluntariosos de los egarenses.
Los delanteros isleños comenzaron a llegar poco a poco a las medianías de la portería rival, lo que hacía que el Egara 1935, a pesar de que no se jugaba nada, empezara a retrasar líneas.
Cuando se llegó al minuto 30 de la primera mitad, el Tabu aprovechó su primer penalti córner para que a tiro de Gonzalo Altuna, Agustín Núñez desviara la bola poniendo el 1-0, con el delirio de los jugadores y aficionados, que veían más cerca su objetivo.
Con los jugadores del Egara 1935 pensando en el descanso, Toshio Aoki remontó la línea de fondo por el lado izquierdo, y ante la salida del guardameta egarense, puso en el electrónico el 2-0 antes de que los árbitros pitasen el descanso.
Tras comenzar el segundo tiempo, los egarenses se lanzaron sobre la portería de Pol, el cual evitó a tiro de Crespi que los catalanes recortaran distancia. Con el conjunto rival con sus líneas estiradas buscando el gol, una jugada del grancanario Toshio Aoki por la parte izquierda acabó en asistencia al Pato Morales, que sólo ante el portero egarense marcó el 3-0, cuando aún no se había cumplido el minuto 10.
Apoteosis final
Cinco minutos después llegó la apoteosis, cuando Agustin Núñez aprovechó un contragolpe de Cristian Suárez por la derecha, para poner el 4-0, que sentencó el partido
Pasaban los minutos y el técnico grancanario, Jesús Martin, vió que la victoria era cosa de minutos y le dio la alternativa al portero juvenil, Adrián Reyes.
En estos últimos minutos, la afición ya estaba celebrando el ascenso y fueron los minutos en los cuales los terranenses tuvieron sus oportunidades más claras, ante el contagio de los jugadores con la afición. En el último minuto del partido, el Egara 1935, marcó el gol de la honrilla, ante un conjunto grancanario que ya saboreaba el retorno a la máxima categoría del hockey español.
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