Bien, presento la primera broma (y por ahora única) que hemos hecho entre mis amigos y yo (yo las ideo, ellos siguen los papeles que les marco).
La llamamos Fuckwall. Decir que se llama así por una larga historia, pero el nombre resultó gracioso y caló en nuestros corazones.
Fuckwall 1.0:
Pitu: "Oye Canary, quiero gastar una broma porque estoy rascao, ¿pero a quién se la hacemos y que se acojone fleje?".
Canary: "Al Cabeza, y se como. Mira, ¿ves la ventana esa? Si cogemos y ponemos una figura detrás de la ventana te digo yo que se acojona fleje".
Pitu: "¿Pero tu crees que caiga?".
Canary: "Mira te digo yo a tí que cae fijo, si no cuando salga de la habitación, cuando salga del baño que lo tendrá enfrente".
Cogimos una toalla mía oscura, una toalla blanca del apartamento, una percha, un palo de cepillo y arrancamos varias ramas, hojas y un par de plantas que nos sirvieron para atar todo aquello. El resultado fue igual al hombre sin sombra.
Lo dejamos colocado en la ventana, pero tapando la ventana con otra toalla, para que no lo viese al entrar.
Entonces llegó la víctima, el Cabeza, con su novia, la otra víctima.
Nosotros les dejamos intimidad, como buenos amigos, y nos pusimos a hablar del Mothman, uno de esos seres que no se pueden probar su existencia, pero que acojonan muchísimo (y del cual les recomendaría que se informasen

Este es el Mothman:

Nosotros por nuestra parte, con musiquita y tal no dejabamos sospechar de nuestras intenciones, pero entonces... "la palanca se saltó" y comenzamos a gritar.
Entre nuestros gritos de "aquí pasa algo raro" y los del Cabeza de "no hay luz y oigo pasos fuera" (seguramente el segurita de los apartamentos) se montó un espectáculo. El Cabeza salió de la habitación con su novia, como yo planeé. La pared tapaba la ventana, pero cuando dió un paso al frente, ¡descubrió la figura!.
Cabeza: "HAY ALGUIEN!!!, AHÍ HAY ALGUIEN".
El chico corrió despavorido, se encerró en la habitación, dejó a su novia fuera y él no permitía el paso, a la vez que decía... "SEÑORES, ENTREN AQUÍ, SI CERRAMOS LA PUERTA LA HABITACIÓN TIENE BARROTES EN LA VENTANA Y AQUÍ NO ENTRA NI DIOS".
La verdad, nunca escuché gritos tan agónicos y de miedo como los de esa noche. Mi amigo salió, y vió de nuevo la figura y volvió a gritar y a esconderse. Luego de un rato, caminó hasta ella, para meterle un piñazo, pero de sus labios salió un...
Cabeza: "Pero que hijos de puta...."
La broma la calculé al milímetro...
Ahora estamos pensando en hacer otra, que será el Fuckwall 2.0, y que también tengo preparada, a los amigos que necesito reclutados, y los materiales necesarios a punto. Sólo falta un pequeño despistado que quiera pasar miedo jejeje ^^
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