
Llegó Paco Jémez, triunfo en casa y respiro. Se hacía necesaria esta tregua.
Llevamos unos días tranquilos gracias a un buen resultado. El fútbol funciona con resultados y nosotros, sin hacer un gran partido, al menos alcanzamos para sumar tres puntos importantísimos. Pero hay que seguir. Esto no ha terminado
¿Esperaba un año tan negativo? Vino de Argentina con grandes expectativas y las circunstancias no han acompañado. Lesiones, derrotas, proyecto fracasado...
Por supuesto que no. Parece que me meó un elefante al llegar aquí... (Ríe) Cuando uno da el salto al fútbol europeo, como fue mi caso, lo hace con toda la ilusión del mundo. Luego, el fútbol es impredecible. Pero conste que también tuve años malos en Independiente. Lo que, desde luego, me ha perjudicado muchísimo son las lesiones. En este semestre he padecido cuatro de importancia, que me impidieron coger ritmo, regularidad... Y en Argentina, entre una competición y otra, llegué a enganchar más de ochenta encuentros oficiales de manera consecutiva. Nunca me lastimé como aquí. Y a eso sí que no estaba para nada acostumbrado. De hecho he jugado menos de la mitad de los partidos. Encima, el equipo no anduvo bien. Eso me dolía muchísimo más.
En su país tiene buen cartel, fama y prestigio. ¿Piensa que su caché se ha recortado por el rendimiento que ha dado en la Unión Deportiva?
Tampoco lo pienso. Mi único pensamiento es trabajar día a día y, en estos momentos, tratar de finalizar la temporada lo mejor posible, ayudar a los compañeros. Creo que tengo tiempo para resarcirme si estoy bien. Queda todavía.
¿No le extraña a sus compatriotas su situación?
Seguro. Me llaman y me preguntan el motivo de que las cosas no hayan salido. Pero uno es profesional y se tiene que hacer fuerte. Soy joven pero he aprendido a convivir con todo lo que tiene que ver con el fútbol. Y me han dicho que, por desgracia, sueles tener más malos momentos, porque siempre, a los porteros, se les juzga más por errores que por aciertos.
Aquí la gente le ha pitado. No ha terminado de darle seguridad a la grada.
Tengo que respetarlo. En Argentina no se juega tanto con los pies. Aquí, en Europa, por lo que veo en Las Palmas, sí se entrena más. Y yo he aprendido esta faceta que no utilizaba. Es el aspecto que me ha podido ocasionar los pitos. Pero es que aquí me ha sido imposible dar mi verdadero nivel. Cada vez que me he empezado a encontrar cómodo en el marco, lesión. También soy crítico conmigo mismo y me exijo, aunque no recuerdo haber encajado por un fallo gordo.
Le queda un año de contrato con Independiente y su futuro depende de lo que allí decidan. ¿Si fuera por usted seguiría?
Por supuesto. Ciudad linda, gran club, muchas posibilidades de armar un proyecto el año que viene para ir a la Primera y ser punteros... Estoy cedido y en junio habrá que ver.
¿Asume que lo tiene complicado?
Claro. Tengo bronca porque este año no se ha visto de mí lo que quería y eso dificulta que pueda seguir. En todo caso yo estoy centrado en recuperar mi nivel sin lesiones y ser el de antes aquí o en Argentina. Confío en mis posibilidades.
Sonó nada más llegar a Las Palmas para la selección de su país. ¿Mantiene el reto?
No renuncio para nada, si bien ahora lo tengo mal porque en la Unión Deportiva las cosas no fueron como deseaba. En un futuro no se sabe.
Maradona preguntó por usted, le siguió...
Habló con mi representante y le dijo que estaba entre los tres o cuatro arqueros que podía llamar. Sí, preguntó por mí. Fue algo bonito. Ojalá se vuelva a dar. ¿Vieron todos los goles que necesitó Higuaín para ser citado? Es un ejemplo de lo caro que está ahora el puesto en Argentina.
Hace poco le vimos hablar con Daniel Carnevali. ¿Le trasladó ánimos o alguna consigna especial?
Sí. Le hablé de las lesiones, de que estaba fastidiado. Daniel me dio ánimos. Conversamos de vez en cuando.
Por Gatti, por Montoya... Dicen que para ser portero hay que estar un poco loco. ¿Es su caso también?
(Ríe) No, no. Puso ejemplos de gente con un estilo peculiar. Yo no soy tan así... Me fijaba mucho en Cañizares. Me gustan Casillas, Valdés, el del Villarreal, Diego López se llama ¿no?
¿Y el nivel del equipo? Compara con el campeonato argentino y...
Hay compañeros que podrían jugar perfectamente en la Primera argentina. Y en los equipos que pelean por salir campeones.
Con todo, ¿ha podido disfrutar del fútbol en España?
Sí, la experiencia para mí ha sido enriquecedora seguro.
Suerte para lo que queda.
Fue un placer.
