
¿Juicio paralelo? Ya quisiera la justicia ser tan rápida. Para cuando quiera darse cuenta, los medios de comunicación se han erigido en policías, fiscales y jueces. En la investigación de la desaparición y posible asesinato de los niños Ruth y José Bretón, en menos de 24 horas se puede no ya establecer un veredicto sino incluso imponer la pena.
La masa enfurecida ya tiene a quién seguir.
La celebración del juicio es una mera formalidad. Y si utilizamos la expresión completa de ‘juicio justo’ –una expresión que debería sonar redundante en una democracia–, es algo peligrosamente cercano a una quimera en el caso de que al final el juicio se celebre con jurado. ¿Podrán sus miembros abstraerse de la presión social sobre este caso?
Las portadas de prensa y los programas matinales de televisión de hoy se han lanzado como fieras a la noticia. La amplia cobertura es comprensible hasta cierto punto por varios factores: la sorpresa por las nuevas revelaciones que dejan patente un grave error policial y el interés que el caso ha suscitado desde hace tiempo, no sólo en Córdoba. Luego están las motivaciones no tan confesables: venta de diarios en kioscos, páginas vistas en Internet, puntos de audiencia televisiva, sueldos de presentadores.
(articulo completo con fotos y enlaces en: http://www.eldiario.es/zonacritica/2012 ... car-carne/)