A tí que has fallado tantos goles. Tú que has caído de agotamiento, sientes que el pulmón se te va a salir por la boca, que corres hasta la extenuación, defendiendo la camiseta hasta el último segundo, galopas por la banda hasta el último suspiro y atacas con mas corazón que cabeza, te doy las gracias.
Pues no hay que lamentar el fallo porque sé que lo das todo.
Tú que has fallado ese pase que se convertía en el último, que en la posición donde defensa y ataque se unen de la mano, puedes no encontrar la forma de zafarte de cuantos enemigos se presentan en el campo de batalla, que te sientes superado y puedes ver como el estandarte enemigo se hunde sobre el césped, reclamando el territorio como propio. Ante los ojos de tantos eres nuestra única esperanza, y ahora yaces en el suelo de rodillas víctima del cansancio.
No te reprocharé nada, porque lo has intentado con todas tus fuerzas.
Tú que permaneces inmóvil, mientras las huestes bárbaras desean conquistar nuestro marco, recibes la carga, las fintas, los regates, y cuya única misión te ha sido enconmendada a veces se torna tan difícil que es imposible evitar el asedio. Tú que eres el último antes de que nuestras murallas se resquebrajen, nuestras ilusiones pendan de un hilo llamado arquero, sientes que tus músculos fallan y asistes impotente ante la derrota. Te agradezco mucho haber entregado tu vida para defender la nuestra.
Y tú, que eres el último hombre dentro de la ciudad, esperando que revienten el portón con sus arietes, entren a saquear nuestras ilusiones y se lleven nuestros puntos, sientes que te ha podido esta vez el enemigo y te sobrepasa. En tu mente todo sucede demasiado rápido y casi no tienes tiempo a reaccionar, y la fatalidad de la conquista termina en gol. A ti, que descansas sobre el césped, con los ojos vidriosos, maldiciendo la mala fortuna te tengo que decir algo.
Defendiste un escudo, una isla, un sentimiento, y lo has hecho con él en tu corazón.
Pero hoy no es ese día, hoy es el día en el que el atacante marcha rápido, con el balón pegadito a las botas, y marca el gol.
Es el día en el que el centrocampista toma posesión del territorio y a sus invasores les hace caer uno tras otro, hasta dar el último pase.
Es el día, en el que ellos cargaron con más rábia, y más fuerza, porque se jugaban mucho más que el orgullo, y tú no te tambaleaste defensor. Aguantaste en tu posición aún sabiendo que podían ganar y aún así les robaste sus esperanzas de asediarnos.
Y es el día en el que el último hombre, que espera agazapado en su trinchera a que le disparen, defendió con su vida a su escudo, poniendo de manifiesto que nosotros no nos rendimos, que luchamos hasta el final, y si fallamos... lo habremos hecho.
Pero hoy no es ese día, hoy me siento orgulloso de ir a la batalla con un estandarte amarillo y azul, y allí donde otros caerán yo levantaré victoriosa mi bandera sobre el terreno de juego.
Hoy convertiremos este mundo, en un mundo amarillo.
Por un mundo amarillo
- Canary
- Juez de la administración concursal
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- Registrado: Mié Jun 21, 2006 10:07 pm
- Ubicación: Donde nace el sol
Re: Por un mundo amarillo
Este es un pequeño regalo, creo que ha bajado bastante el nivel de comentarios en el foro, aportaciones y demás.
Nos hemos convertido en aficionados peleados, unidos por una bandera, pero al fin y al cabo, no nos defendemos los unos a los otros.
No quisiera que esta afición termine siendo como la del Valladolid, que tienen 2 grupos enfrentados entre ellos, por ideologías y demás, por ello les pongo un pequeño escrito que me ha salido sobre las 2 de la mañana, el cual quiere ser una aportación para sacar las hachas de guerra contra quienes vienen a desvalijarnos (de forma deportiva) y no contra nuestro vecino.
Una aportación para que vuelvan los foreros de antes que compartían puntos de vista, conocimientos futbolísticos bastante diversos y enfrentaban entre sí planteamientos y demás de una manera tan correcta y deportiva que yo cuando me registré en el foro de verdad aprendí muchas cosas.
Todo sea dicho, por un mundo amarillo.
Nos hemos convertido en aficionados peleados, unidos por una bandera, pero al fin y al cabo, no nos defendemos los unos a los otros.
No quisiera que esta afición termine siendo como la del Valladolid, que tienen 2 grupos enfrentados entre ellos, por ideologías y demás, por ello les pongo un pequeño escrito que me ha salido sobre las 2 de la mañana, el cual quiere ser una aportación para sacar las hachas de guerra contra quienes vienen a desvalijarnos (de forma deportiva) y no contra nuestro vecino.
Una aportación para que vuelvan los foreros de antes que compartían puntos de vista, conocimientos futbolísticos bastante diversos y enfrentaban entre sí planteamientos y demás de una manera tan correcta y deportiva que yo cuando me registré en el foro de verdad aprendí muchas cosas.
Todo sea dicho, por un mundo amarillo.