La Declaración Universal de los Derechos Humanos, que tanto sudor y lagrimas costó conseguirlo, así lo recoge desde 1948.
Estos derechos, son constantemente vulnerados y trasgredidos. E incluso, con frecuencia se vitorea aplaude al trasgresor frente a la dignidad de quien piensa y expone de distinta forma. Los comicios y declaraciones electorales suelen ser un ejemplo de ello. Precisamente por parte de aquellos que mas deberían de velar porque estas reglas de juego se cumpliesen.
De ahí que, desde mi punto de vista, estos problemas no deberían de resolverse negando ese derechos de pensar y exponer libremente. Mas bien diría que habría que llamarle la atención a ese otro que no sabe respetar y trasgrede esos derechos fundamentales. Siempre claro está, que estuviésemos a favor de esos derechos y a esa declaración que les recoge.
Si esto tan sencillo, pero tan difícil de llevar a la práctica, induce a alguien a la reflexión ya me consideraría mas que satisfecho y por supuesto que para nada, molesto en el terreno personal.
Saludos,
Mykel




