Jonathan Viera a su llegada al aeropuerto de Gran Canaria sintetizó una tarde convulsa, la del pasado sábado, donde el club admitía haber aceptado una oferta del Granada para su traspaso por tres millones de euros. Jonathan declaró que, «bajo ningún concepto», se movería de la Unión Deportiva Las Palmas. Y ganó el pulso.
Anoche, Miguel Ángel Ramírez, presidente de la entidad, Juanito, asesor presidencial, Jonathan Viera y su representante, Pedro Bravo, mantuvieron una reunión en Madrid para aclarar el futuro del joven canterano. Finalmente se quedará en Las Palmas hasta que concluya la actual temporada. Posteriormente, a tenor de los objetivos del club amarillo para la próxima campaña, «decidiré si me marcho o si sigo», comentó a los medios de comunicación presentes a su llegada a la isla.
El grancanario, que se mostró «muy sorprendido por la noticia», entiende que «era una gran oferta para el club», pero admitió que no era de su interés ser traspasado en este mercado invernal. «Me cogía muy rápido y faltaban pocos días para el plazo», dijo Viera. «Miguel Ángel Ramírez me entendió», explicó.
Tras la reunión, el presidente le dijo que «muy bien, que siguiera en el equipo para intenter meternos ahí arriba y si al final de año viniera un buen equipo de Primera División y les gusta a las dos partes, me marcharía», comentó el jugador amarillo. Por lo tanto, reiteró el agradecimiento a Ramírez: «El presidente me ayudó muchísimo, le tengo que dar las gracias porque no era una situación fácil para el club», concluyó.
