Miguel Ángel Ramírez ha firmado con Manuel García Navarro esta mañana ante notario un acuerdo para el fin de la ‘guerra’ entre ambas partes que pondrá fin al proceso concursal. Se le reconocen al ex presidente 4,5 millones de euros de deuda, que se pagarán en distintos plazos según la categoría del equipo. El presidente pedirá mañana en el Juzgado de lo Mercantil número 1 el fin del concurso tras más de diez años de proceso.
«Mañana vamos a presentarle a su señoría la finalización del concurso y por lo tanto la Unión Deportiva Las Palmas será un club libre». Son las palabras de Miguel Ángel Ramírez que este martes ha anunciado el fin de los litigios que mantenía la entidad con Manuel García Navarro desde hace más de cinco años. El riesgo de descenso a Segunda División B por parte de la Liga de Fútbol Profesional —como el ‘Caso Guadalajara’ del pasado verano— al haber injerencias en el capital social del club, ha precipitado un acuerdo que, como ha declarado el propio Ramírez, tarde o temprano tendría que firmarse.
Se le reconocen al ex presidente Manuel García Navarro 4,5 millones de euros que se pagarán en distintos plazos y según la categoría en la que milite la entidad amarilla. Lo hará a través de un pagaré por valor de 500.000 euros del traspaso de Vitolo al Sevilla, y con el ingreso de 3 millones si la Unión Deportiva asciende a Primera División. En caso de no lograr el ascenso, objetivo que ha tildado como «muy importante», se le abonará 2,5 millones de euros. El resto se pagará a través de publicidad y palcos VIP durante diez años. Ramírez también subrayó que existe una cláusula de confidencialidad en el acuerdo firmado, a propuesta de los servicios jurídicos del Navarro.
Además de este caso que mantenía bloqueado el fin del proceso concursal, estaba pendiente otro litigio con el Deportivo de la Coruña por una cuantía cercana a los 1,5 millones de euros —1,2 millones de euros más costas judiciales— reconocida tras una sentencia del juzgado de Primera Instancia numero 12 de Las Palmas de Gran Canaria el pasado mes de marzo. Ramírez también indicó que esa deuda, en concepto del traspaso de Gabriel Schürrer en el año 2000, se iba a satisfacer en un periodo de tres años. «Al presupuesto de la temporada que viene habrá que restarle 3,2 millones de euros de deuda de años anteriores, hablo del acuerdo de crédito con la CAM — Caja de Ahorros del Mediterráneo— más el millón de Manuel García Navarro y el millón y medio del Deportivo de la Coruña», apuntaba a modo de resumen.
Con los dos principales asuntos judiciales en vías de solución, el Consejo de Administración pedirá este miércoles al Juzgado de lo Mercantil el cierre del proceso concursal que se inició en 2004. La pesadilla en la que se embarcó el club para evitar la desaparición por la deuda de 72 millones de euros que arrastraba está próxima a concluir. El presidente amarillo estimó que en verano podría haber una sentencia definitiva que confirmase el fin de la ‘era concursal’ de la Unión Deportiva Las Palmas.
«Podríamos haber descendido a Segunda B»
Explicó Miguel Ángel Ramírez que el acuerdo firmado este martes ante notario era fundamental para la supervivencia de la entidad. El capital social de la Unión Deportiva Las Palmas no estaba claro y el riesgo de descenso por parte de la Liga de Fútbol Profesional era real, como ya le sucedió al Club Deportivo Guadalajara el pasado verano. «Ante la Liga no teníamos tiempo, ¿o quieren un caso Guadalajara? No puedo poner en riesgo la continuidad del Club», explicó en la sala de prensa del Estadio de Gran Canaria.
«No conseguir el ascenso sería un problema para nosotros el próximo año. Tendríamos que agudizar el ingenio en Segunda División», esgrimió el rector amarillo quien reconoció que era inviable seguir dilatando el caso de Manuel García Navarro ante la justicia. «Estamos sometidos a los juzgados, no vamos a estar constantemente con los embargos porque tendría un fin. Ahora existía un peligro real de descenso a Segunda B. No puedo estar jugando con el futuro de la entidad, tengo que actuar de una manera diligente. Si nosotros entendemos que ya no tenemos más recorrido no podemos poner en peligro la supervivivencia de la entidad», espetó.
Con el acuerdo se reconoce por parte de Manuel García Navarro que el capital social es de 1.780.000 euros, retirando el ex presidente la denuncia sobre este aspecto y los relativos a las supuestas faltas sobre su honor e imagen. El Club le impondrá este sábado, tras un almuerzo con empresarios y políticos, la insignia de Oro y Brillantes del Club al igual que Germán Suárez. «Esto no es ni una bajada de pantalones ni tener que plegarnos a García Navarro. Esto es por el bien de la Unión Deportiva Las Palmas», apuntó posteriormente Ramírez recalcado que este acuerdo «es una gran noticia».
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García Navarro y Germán Suárez recibirán la insignia de oro y brillantes del Club
