Las Palmas vuelve a imponerse ante la adversidad

CONTRACRÓNICA | Pintaba feo el encuentro de Mendizorroza para una Unión Deportiva Las Palmas que llegaba a la cita con la ausencia de cuatro hombres habitualmente titulares en el esquema de Paco Herrera para enfrentarse a un equipo necesitado de puntos cuyo planteamiento ya se preveía que fuese un continuo repliegue y contragolpe.

Y así fue como el Alavés planteó el partido: con juego subterráneo, faltas continuas y parones. Las Palmas no encontró la fluidez habitual y cuajó una primera parte bastante discreta en la que sólo Araujo puso algo de luz con una ocasión muy clara para adelantar a los amarillos pero con una definición ante el guardameta rival que dejó mucho que desear.

El escenario empeoró aún más al inicio del segundo tiempo cuando el cuadro local se ponía por delante en el marcador en una jugada en la que los defensores del bando grancanario encadenaron una serie de errores y despistes que facilitaron la tarea a los hombres del Alavés. Christian Fernández estuvo muy lento, su par se adelantó en la carrera por el balón, y los centrales no anticiparon ante la embestida de Despotovic al área para rematar.


Poco tiempo después Roque se marchaba a vestuarios antes de tiempo después de ver su segunda cartulina amarilla por dejarse caer junto a un rival simulando una falta inexistente. Una sanción justa. La primera de las amonestaciones, sin embargo, se había producido en el primer minuto de partido, en una jugada intrascendente en la que la tarjeta fue excesivamente rigurosa.

Con desventaja en el tanteador y con un hombre menos a falta de algo más de 25 minutos para el final del partido. Ese era el panorama para el combinado visitante ante un Alavés que tras el gol logrado se encerró en su propia parcela del terreno de juego para vivir de los contraataques, en vista de la superioridad. Si a los amarillos ya les había costado superar la muralla alavesa con once hombres, con diez y con el cansancio acumulado la tarea se antojaba aún más complicada.

Momo y Jonathan Viera entraron al terreno de juego para aportar soluciones en ataque, mientras que Dani Castellano sustituyó a un desaparecido Christian Fernández, con el objetivo de dar mayor profundidad al sector siniestro del equipo amarillo. Mejoró la escuadra de Herrera con las sustituciones y volvió a levantarse ante la adversidad, negándose a rendirse pese a que las circunstancias apuntaban a la tercera derrota del curso. David Simón subió al ataque en su enésima carrera por la banda, superó a su marcador y sirvió un centro de oro para que Jonathan Viera marcase el gol salvador en lo que era su nuevo debut con la casaca amarilla.

La semana anterior Las Palmas logró mantener un resultado favorable con ocho hombres sobre el césped logrando incluso anotar un tanto y en esa jornada, con diez, fuera de casa y ante un rival replegado en su campo, salvó un punto que puede ser muy importante de cara a la consecución del objetivo, teniendo en cuenta que este domingo se enfrentan entre sí dos de los rivales que pugnan por el ascenso. La máquina de puntuar de color amarillo sigue funcionando y se queda con el liderato una vez concluida la primera vuelta.