CONTRACRÓNICA | Se termina la maratón de 42 partidos en nueve meses y comienza la contrarreloj de las dos semanas. La Unión Deportiva Las Palmas cerró el telón de su temporada de Liga con un triunfo que le permite llegar al primer partido de la eliminatoria ante el Pucela con un bagaje de cinco victorias consecutivas.
No hubo intensidad ni tensión competitiva en el Estadio de Gran Canaria y tampoco se esperaba que la hubiese. Ni la Unión Deportiva ni el Deportivo Alavés tenían nada en juego en este choque correspondiente a la jornada final del campeonato y ambos entrenadores utilizaron la disputa para probar cosas: Herrera dio oportunidad a los menos habituales y Alberto López innovó con una linea de tres centrales y dos carrileros al inicio.
Y es que Las Palmas ya hace tiempo que tiene en su mete el envite ante el Real Valladolid y el encuentro de este domingo no era más que un puro trámite. Sí tenía importancia el duelo, sobre todo, para el debutante Nili. El extremo grancanario, reconvertido a lateral, estuvo muy participativo durante su puesta de largo con el primer equipo amarillo y dejó destellos de sus buenas maneras con el balón en los pies. Sin embargo, su cuento de hadas tuvo un final infeliz ya que se lesionó al principio del segundo acto y tuvo que dejar el terreno de juego apoyándose en los doctores y con una sonora ovación de los 8.523 valientes que se personaron en el recinto para ver este pobre espectáculo.
Otros que también tomaron en consideración la relevancia de esta pugna para mejorar dentro del estatus que tenga de ellos el entrenador de cara a la promoción son Ortuño o Momo. El ariete murciano no estuvo acertado en sus primeras intervenciones pero en la primera acción que tuvo en área rival metió el balón a la red a servicio del extremo de Las Torres, quien fue el hombre que inauguró el marcador desde los once metros.
En esa segunda mitad en la que llegaron tantos goles, Herrera premió con minutos a dos olvidados a lo largo de todo el curso como Héctor Figueroa o Tana. El delantero logró su gol y el mediapunta regaló detalles de su tremenda calidad. Todos contentos, en definitiva.
La nota negativa, como casi siempre en los últimos enfrentamientos, fue la relajación mostrada por el combinado canario en el último cuarto de hora de partido. Con un resultado tan a favor y sin tensión para ir a por más, el equipo insular cedió demasiado terreno permitiendo que el Alavés maquillase el resultado.
Así las cosas, Las Palmas se despide de la campaña regular y se centra en su verdadero objetivo: jugar las eliminatorias que dará opción a la escuadra amarilla a ascender a Primera División. La primera de ellas, en Valladolid.