La Unión Deportiva más plana de la temporada naufraga de manera alarmante en el Coliseum Alfonso Pérez. La UD no reaccionó nunca, tuvo errores impropios y deja un solar de dudas.
Peligro. La Unión Deportiva parece hundida en su espíritu en la octava jornada. Bajó los brazos en Getafe, en lo que en un principio se había calificado como una final. Una empanada mental en los primeros diez minutos pusieron a la Unión Deportiva con dos goles por salvar. El resto de minutos fueron de llorar. Y de llorar fuerte.
Falló el equipo grancanario en la imagen, y lo más preocupante, en la actitud. En ningún momento tuvo capacidad para reaccionar, seguramente ni intención. El Getafe, con orden y poco más, se paseó con extrema comodidad en su feudo. Las Palmas era un equipo más tierno que una cesta de gatitos cerca de una estufa. Nada que temer.
Herrera cambió el sistema con una defensa de cuatro, dando entrada a un previsible lateral más defensivo que Dani Castellano: Javier Garrido. Y su papel fue realmente preocupante. También entró de inicio Nauzet Alemán cuya nota tendió a un suspenso clamoroso en su estreno en Primera División con la camiseta de la UD.
El desequilibrio entre las bandas a nivel defensivo se vio claro desde el principio. Ni Simón ni Garrido tenían ayudas de los teóricos jugadores de bandas, que por los movimientos y dibujos realizados pareció desconcertar a los propios futbolistas. Los dos primeros zarpazos del Getafe se gestionaron de la misma manera: aprovechando la debilidad de la izquierda para encontrar facilidad en la derecha. Realmente sencillo. Realmente grave.
Álvaro rompió a correr en el minuto 2 para dejar en evidencia a la zaga grancanaria. Cedió al segundo palo a Víctor Rodríguez para que batiera a placer a Javi Varas. El Getafe se encontró un latifundio a las espaldas de los defensores amarillos, este domingo, de rosa.
En el minuto 10, Garrido, perdido en el envite con Pedro León, permitió un centro sencillo del jugador azulón que encontró en la otra banda a Sarabia, otra vez, solo. Simón había subido en la jugada anterior y Nauzet no bajó a tapar a su marca. Error en cadena. Los brazos bajados. La Unión Deportiva sin alma.
Reaccionar es un verbo completo, no da lugar a medias tintas. Es un proceso y la Unión Deportiva ni siquiera lo vio interrumpido. No existió la intención. La gravedad de la descripción encierra un análisis amplio de una tendencia: la UD no sabe andar sin espacios, es un auténtico encefalograma plano, sin ideas, sin atrevimiento ni corazón. A duras penas se contabilizaron disparos. Guaita tuvo una tarde plácida. En su carrera profesional, pocas así.
El cuadro madrileño, con orden, se llevó el partido. Arriba quedó la chispa de Álvaro Vázquez y Sanabria. Con muy poco controló el partido ante una Unión Deportiva noqueda, perdida en su propio ser, necesitada de un diván, quién sabe si de medicación.
Alargar la agonía
Herrera apostó por cambiar un matiz en la segunda mitad, tratar de buscar más a Willian José —entró por Wakaso en la reanudación—, y dar cierta libertad a un desconcertante Sergio Araujo. El argentino está absolutamente perdido. Hace todo al revés y la forma física no le acompaña. Algo a mejorar para el jugador franquicia de esta Unión Deportiva.
La UD contabilizó un único disparo de Jonathan Viera entre los tres palos. Con la Unión Deportiva descompuesta, con los brazos bajados y sin ninguna opción, Scepovic amplió la renta. Primero aprovechando otro pase de la muerte y luego colándose entre los centrales para poner un 4-0 en el marcador que causa sonrojo a nivel numérico y vergüenza a nivel de actitud. A empezar de cero. Y con la soga aligerándose de un lado. En las manos de Herrera está.
Getafe Club de Fútbol 4-0 Unión Deportiva Las Palmas
Getafe Club de Fútbol: Guaita; Lago, Alexis, Vergini, Damián; Lacen, Juan Rodríguez; Sarabia, Víctor, Pedro León; Álvaro Vázquez. Entrenador: Fran Escribá.
Unión Deportiva Las Palmas: Javi Varas; David Simón, Aythami, Bigas, Garrido; Culio, Wakaso (Willian José, min. 45); Roque, Jonathan Viera, Nauzet Alemán; Araujo.
Goles: 1-0, Víctor Rodríguez, min. 2; 2-0, Sarabia, min. 10; 3-0, Scepovic, min. 85; 4-0, Scepovic, min. 91.
Árbitro: Fernández Borbalán, comité andaluz. Amonestó a los locales Vergini y Pablo Sarabia; y a los visitantes Wakaso y Culio, expulsado de forma directa (min. 80).
Incidencias: 5.875 espectadores en el Coliseum Alfonso Pérez. La Unión Deportiva vistió de color rosa.