Las Palmas suma más de seis semanas sin ver puerta en el Estadio de Gran Canaria, un estadio donde sólo pudo marcar ante el Sevilla para conseguir la única victoria que tiene en su casillero.
El cuadro de Quique Setién tratará este viernes de reencontrarse con el gol en casa, ante una afición que no canta un gol de los suyos en las gradas desde el 23 de septiembre, cuando en la quinta jornada de liga Roque y Alcaraz batían a Sergio Rico del Sevilla.
Desde entonces, ni ante Eibar ni ante Villarreal se logró marcar, como tampoco lo consiguió el equipo amarillo contra Levante ni Rayo Vallecano. En cinco visitas al Gran Canaria, sólo se anotó en una, lo que convierte al cuadro grancanario en el menos realizador como local sumando tan sólo dos goles.
A pesar de ser el cuarto equipo de la liga que menos tantos encaja como local, tras Real Madrid, Valencia y Málaga, la falta de gol amarillo hace que de los 15 puntos disputados en Gran Canaria sólo se hayan logrado sumar 5. Especialmente paradójico resulta el caso del Real Madrid, cuyo único gol recibido en casa fue el que logró Hernán el pasado sábado.
Por otra parte, el cuadro amarillo no está logrando sacar excesiva rentabilidad a los pocos goles que marca, ya que sólo los tantos anotados ante el Sevilla y ante el Celta acabaron convirtiéndose en puntos.
Por ello, se hace de vital importancia recuperar el gol en un estadio en el que la temporada pasada se hicieron más goles que en ningún otro campo, hecho que acabó siendo decisivo en la consecución del ascenso. Por marcar en casa pasan muchas de las opciones de la UD para salir de los puestos de abajo y este viernes tiene una oportunidad para volver a cantar goles en el Gran Canaria.