Setién únicamente cuenta con Aythami Artiles como central puro y está condenado a experimentar con gaseosa en El Molinón. David Simón es duda en una zaga repleta de bajas.
Tendrá que estrujarse Quique Setién el cerebro para conformar una defensa de garantías en el partido trascendental del próximo domingo en El Molinón ante el Sporting de Gijón. Una plaga de bajas e infortunios azotan a la línea defensiva. Tanto que está obligado a experimentar.
La baja confirmada por seis semanas de Pedro Bigas es la última de una desoladora racha a nivel físico. David Simón arrastra desde hace semanas molestias en la espalda, aunque apunta a la titularidad en Asturias. David García, con problemas musculares, es baja al igual que Antolín Alcaraz. El central paraguayo volvió a lesionarse el pasado domingo. Hay que añadir que Ángel López todavía no está disponible. Un drama.
Las bajas obligan a Setién a innovar en el centro de la defensa. Ante la Real Sociedad en Copa del Rey probó distintos centrales en varias fases de la segunda parte. Garrido se retiró con molestias musculares, pero apunta a ser el central que acompañe a Aythami Artiles. El de Arguineguín es el único central puro con el que cuenta el técnico cántabro. Dani Castellano actuará en el flanco izquierdo.
Otras alternativas podrían ser Hernán Santana o Vicente Gómez. De hecho, esta sociedad fue la que terminó el partido ante el cuadro donostiarra como pareja de centrales. Un episodio con tendencia surrealista que tendrá que resolverse con fuego real el próximo domingo ante el Sporting de Gijón.
