El equipo amarillo quiere centrarse únicamente en el fútbol tras una semana donde apenas han habido protagonistas en el césped. Para ello el equipo de Setién tiene la intención de comenzar el último tercio de temporada por fin con una victoria fuera de casa que dé algo de aire a la actual situación clasificatoria.
Las Palmas arrancará en los próximos días un tramo de temporada que puede resultar decisivo para sus aspiraciones de permanencia. Comenzará así el tercer tercio de la temporada, en el que el equipo de Setién está obligado a mejorar los números de los dos tercios anteriores si quiere mantener opciones de conseguir su objetivo.
Actualmente la UD suma 21 puntos en 25 jornadas, quedando en juego 39 puntos más. Si se atiende a los números habituales en los que se ha movido la permanencia en las últimas temporadas, los equipos han necesitado como mínimo 37 puntos para salvarse -la temporada pasada Granada y Deportivo sumaron 35 y se salvaron, pero por el triple empate a puntos con un Eibar que acabó salvándose gracias al descenso administrativo del Elche.
No obstante, habitualmente los 37 puntos se hacen insuficientes, por lo que la permanencia virtual siempre se ha situado alrededor de los 40 puntos. Una puntuación que no le sirvió al Villarreal (41 puntos en la 2011-12), al Betis (42 en la 2008-09) o Zaragoza, que descendió también con 42 puntos en la temporada anterior.
38 puntos podrían ser suficientes
La progresión de los equipos esta temporada apunta a que la salvación estará como mínimo en los 38 puntos, según un estudio del portal web Euro Club Index. Esto implica que Las Palmas deberá hacer el mejor tercio de la temporada en cuanto a puntos para alcanzar la salvación, ya que necesitaría sumar al menos 17 puntos en los 39 que restan.
Esa suma de puntos se podría alcanzar ganando seis partidos y cosechando algún empate en los restantes. No obstante, la trayectoria de Las Palmas fuera de casa obliga a los amarillos a cambiar la dinámica y sumar alguna victoria lejos de Gran Canaria, ya que en la isla sólo quedan seis partidos y ante visitantes como Real Madrid, Valencia o Athletic Club, además de Getafe, Sporting de Gijón y Espanyol.
Fuera de casa, donde está el principal punto débil de los amarillos esta temporada, Las Palmas jugará ante el Eibar este viernes, Villarreal, Real Sociedad, Deportivo, Betis, Granada y finalizará la temporada en Málaga. Lejos de Gran Canaria está la clave de la salvación, puesto que disputará más de un duelo directo, otra de las grandes asignaturas pendientes de los de Setién.
De esta forma, Las Palmas necesitará sumar más que en ningún otro tramo de la temporada y para ello se hace prácticamente imprescindible mejorar las prestaciones fuera de casa, si no quieren verse con la máxima obligación de ganar todo lo que resta en el Estadio de Gran Canaria. La primera oportunidad para cambiar la dinámica de tres derrotas consecutivas pese a la buena imagen, y dejar atrás el capítulo disciplinario que ha estado de actualidad estos días en el Club, este viernes en Ipurúa, el único campo donde ya los amarillos lograron vencer, aunque fuera en Copa del Rey.