Hace poco menos de un año Nili hacía su debut con el primer equipo en Segunda División. Hoy ya es un habitual en las convocatorias de la UD Las Palmas y un fijo de inicio o desde el banquillo para Quique Setién.
Fue el 7 de junio de 2015 cuando Nili Perdomo sorprendió con su titularidad en el último partido de la temporada. Debutó ante el Deportivo Alavés con una victoria que sería la antesala de un ascenso en la última jornada. Varios meses después comenzaría a hacerse un hueco en la Primera División. Un salto considerable.
Este extremo reconvertido a lateral ha llegado como un soplo de aire fresco a la plantilla de Quique Setién. No ha frenado en ningún momento, lo ha hecho todo a la velocidad de la luz. Se estrenó en Copa del Rey ante la Real Sociedad y sólo se perdió un partido de esa competición con importantes logros para la UD. Sumó minutos siendo titular en cuatro de sus cinco partidos de Copa. Sus actuaciones no dejaron indiferente a nadie, se presentaba como un lateral incisivo y eléctrico. A partir de ahí, era cuestión de tiempo que apareciera en Liga ante la plaga de bajas por lesión del primer equipo.
Los primeros minutos de Nili en la Liga BBVA fueron en un escenario magnífico, el Sánchez Pizjuán. Los isleños perdieron pero Quique Setién continuó contando con el canterano. Alternando suplencias con titularidades, acumula seis partidos en la máxima categoría del fútbol español. Con 11 encuentros esta temporada, destaca que ya haya jugado ante el Barcelona y el Real Madrid, siendo titular ante este último. Todo un sueño.
Es un futbolista que aporta cosas diferentes al conjunto canario, acostumbrado a bandas más técnicas que rápidas. Nili ofrece su velocidad para abrir el campo y aprovechar espacios. Desborda con facilidad y busca las espaldas continuamente. Pero sin duda, una de sus mejores virtudes es su falta de complejos. No duda en regatear o lanzar una carrera sea quien sea. No negocia con las decisiones, las lleva a cabo. Aún así, debe ir eligiendo los momentos correctos para que su fútbol sea más eficaz.
Aparte de su calidad y sus cualidades en ataque, Nili no se olvida de la importancia del trabajo. Gracias a ello se ha ganado un sitio, es el primero en presionar y defender. Si pierde un balón no es de los que se queda mirando, trata de recuperarlo lo antes posible.
Son gestos solidarios que el técnico amarillo valora, conocedor de la importancia del esfuerzo colectivo. Nili se desfonda, se vacía en cada encuentro y poco a poco sigue creciendo. Su contrato es la única incógnita que le rodea. Nili termina este año aunque está atado. La UD tiene una opción unilateral de renovación si le otorga ficha en el primer equipo. Parece que la moto de Nili Perdomo estará mucho tiempo corriendo la banda del Gran Canaria.
