La Unión Deportiva Las Palmas lleva en este inicio de Liga unos grandes registros goleadores con una cantidad de 14 goles a favor, una media de más de 2 goles por partido. Pero en contra también acumula un alto porcentaje de gol, los rivales perforan la meta de Javi Varas una media de 1,8 veces por encuentro. Cuando juega la UD hay rock & roll.
En los primeros partidos de Liga, donde la UD llegó a permanecer líder durante la segunda y tercera jornada liguera, los registros goleadores llegaron a ser una sorpresa para la afición canaria, que se vieron gratamente satisfechos por los síntomas que estaba dejando el proyecto amarillo en los albores de LaLiga Santander.
Y es que en pretemporada muchos fueron los medios y aficionados que echaron en falta ese olfato de cara a gol que había dejado la vacante del delantero brasileño Willian José y la confianza en lo fichado para el ataque no pasaban precisamente por ser lo más optimista, sobre todo con el posible nivel al que rendiría el croata Livaja.
Unos de los datos sorprenden comparados con la temporada pasada es que la UD en los tres primeros partidos de LaLiga anotó diez tantos, los mismo que llevaba en la temporada pasada en la jornada 16. En este curso la Unión Deportiva Las Palmas es el tercer equipo con el mayor registro goleador, empatado con el Atlético de Madrid y sólo superado por los actuales campeones de Liga y Champions, Barcelona y Real Madrid respectivamente.
Pero en la parroquia amarilla no todo son buenas noticias: si ya se hizo inciso durante la pretemporada en los despistes defensivos que le hacían a Las Palmas pasar por apuros en momentos puntuales de los partidos, durante la actual campaña no ha sido para menos. El fútbol de toque también tiene sus riesgos, y es que a veces sacar el balón jugado puede ponerte en peligro en ciertos momentos del encuentro. Es el sexto equipo que más goles recibe de la competición con 11, algo que equilibra con su efectividad de cara a portería contraria.
Las Palmas marca y gana, pero también recibe. Por eso muchos alaban el fútbol descarado y vistoso de la UD, que ofrece espectáculo los 90 minutos. Con asuntos por resolver en defensa, está claro que cuando juega la UD hay goles y emoción para el espectador. Hay rock & roll.