Las Palmas dio su peor versión de la temporada en un día en el que todo salía torcido desde incluso antes de empezar el partido, con algunas decisiones de Setién antes y durante el choque que resultan incomprensibles -admitiendo la ventaja de comentarlo con el partido terminado-. Ni los jugadores ni el cuerpo técnico se salvan de la quema en un partido no para olvidar, sino para aprender. Pero aprender de una vez por todas.
Javi Varas (5) Indefenso. Le cae un cinco como podía haberle caído un ‘sin calificar’. Totalmente indefenso en un encuentro en el que no tiene trabajo y recibe dos goles en los que no tiene nada que hacer por errores previos en córners. Porque salir al primero es una temeridad y en el segundo el balón nunca debe llegar donde llegó. Por lo que sería injusto culpar al sevillano de los goles recibidos.
Michel Macedo (3) Impreciso. Sin ser de los peores del encuentro, el brasileño no estuvo a su nivel habitual y se contagió del nivel general del equipo: gris, sin brillo, sin precisión, sin profundidad y despistado en defensa. Le ganaron la espalda en alguna ocasión que provocó algún córner. También falló en uno de los goles.
Lemos (3) Preocupante. Recuperó la titularidad y, aunque no estuvo tan mal, sí que es para preocuparse el nivel físico en el que está. Tiene 20 años, viene de una semana con varios días de descanso -en la que sufrió un golpe sin consecuencias-, y es la segunda vez que tiene que ser sustituido por problemas físicos. Algo no debe estar funcionando bien cuando un jugador, pese a su posible falta de ritmo competitivo, no aguanta físicamente por segunda vez saliendo de inicio.
Bigas (4) Flojo. Sin demasiados sobresaltos como central y muy tímido como lateral. El balear fue de los que menos desentonó, pero la UD dejó de ser una amenaza por la izquierda desde la lesión de Dani Castellano y no dejó de pasar apuros ante las internadas de Joaquín.
Dani Castellano (4) Lesionado. Estaba pasando un suplicio ante las subidas de Joaquín y el carrilero bético, aunque en ataque estaba siendo el que creó dos contras rompiendo líneas desde atrás. Aún así y a pesar de no haber tenido su mejor día con lesión incluida, el gemelo ahora mismo es un jugador de vital importancia para la UD.
Roque (3) Desconocido. Nota muchísimo la ausencia de Vicente a su lado. Sin él, el teldense queda más expuesto y está más solo, lo que permite al rival presionar más fácil y hacerle la vida imposible. Pérdidas de balón en zonas peligrosas, pases muy imprecisos y mereciendo ver en dos ocasiones una tarjeta que le hubiese impedido jugar ante el Athletic. Un mal día de uno de los que casi siempre está bien.
Tana (3) Perdido. Recuperó su posición habitual como volante, donde suele estar más cómodo porque puede participar más del juego. Sin embargo se perdió entre la telaraña que tejió Víctor plagada de jugadores de corte defensivo sobre el campo y apenas pudo crear peligro.
Jonathan Viera (3) Gris. Hay días que a nadie le sale nada y su talento individual rompe esa dinámica y encuentra un escape. Hoy ni el propio ’21’ estuvo cerca de su nivel. Siempre vigilado de cerca, sin espacios, muy incómodo para avanzar y derrotado en casi todos los duelos individuales.
Momo (2) Desaparecido. Fue el cambio con el que más perdió la UD en el Villamarín. Tana al medio y Momo a la banda para tener un jugador en su puesto natural al costado, pero fue totalmente inefectivo. El de Las Torres apenas participó ni aportó nada. Era un buen día para reivindicar minutos tras estar alejado de los planes de Setién, pero lejos de conseguirlo, pareció dar motivos al técnico para volver al banquillo.
Boateng (5) Salvable. De lo poco que se puede destacar de la UD en la visita al Villamarín. Fue el único que creó peligro durante la primera mitad y no perdió la cara al partido, aunque como el resto de compañeros también pareció estar a ralentí en muchos momentos.
Araujo (2) Inofensivo. Después de varios partidos en Gran Canaria donde se había hecho con la titularidad por méritos propios, el argentino volvió a la oscuridad con un encuentro en el que sólo un acrobático remate dejó constancia de que estaba jugando. Desubicado siempre lejos del área cuando llegaban centros de la banda, fue totalmente inofensivo para una defensa bética que seguramente no esperaba un partido tan plácido.
David García (5) Discreto. Situación similar a la de Javi Varas. Partido sin cometer errores pero sin tampoco hacer nada, porque la UD apenas tuvo trabajo en defensa más allá de las internadas de Joaquín y los saques de esquina.
Vicente Gómez (6) Indispensable. Cada segundo que pasaba en la primera mitad aumentaba el valor del de Schamann para el equipo de Setién. Ausente del once en Anoeta y el Villamarín, curiosamente los dos peores partidos de la UD hasta ahora. No sólo eso, sino que además fue el mejor amarillo desde su entrada, participando mucho, creciendo entre líneas y haciendo lucirse por dos veces a Adán. La luz en un día muy oscuro.
David Simón s.c.
